España atesora multitud de rincones naturales de gran belleza a lo largo de su extensa geografía. Una pequeña parte de esa inmensa riqueza natural se encuentra en los lagos que salpican el mapa del país.

Desde los Lagos de Covadonga a la Laguna de Fuente de Piedra, repasamos 10 de estos espacios únicos por su valor paisajístico y ecológico:

Lago de Sanabria (Zamora)

El Lago de Sanabria, en Zamora, es uno de los más grande de España. Abarca 1,5 kilómetros de ancho por 3 de largo y tiene una profundidad aproximada de más de 50 metros. También es uno de los mayores de Europa. Su extensión permite todo tipo de actividades e instalaciones y en verano se convierte en un importante espacio de recreo.

Lagos de Covadonga (Asturias)

Los Lagos de Covadonga, que son tres, Enol, La Ercina y El Bricial -que sólo tiene agua en época de deshielo o fuertes lluvias-, son tres lagos glaciares situados a más de 1.000 metros de altitud que forman parte el Parque Nacional de los Picos de Europa. El paraje es uno de los espacios naturales más visitados de España, sobre todo en verano.

Lago de Sant Maurici (Lleida)

El Lago de Sant Maurici se encuentra en el Pirineo catalán, concretamente en el municipio de Espot, en Lleida, a 1.910 metros de altitud, en un entorno espectacular. El lago forma parte del Parque Natural de Aigüestortes y Lago de Sant Maurici. El embalsaminto de agua mide unos 1.100 metros de largo por unos 200 de ancho.

Ibones de Anayet (Huesca)

Los Ibones de Anayet son un conjunto de pequeños lago situados a una altura de hasta unos los 2.233 metros en el Pirineo oscense, a los pies del monte Anayet, en el término municipal de Sallent de Gállego. Los lagos forman un conjunto único en el imponente entorno pirenaico.

La Laguna Negra (Soria)

La Laguna Negra de Urbión, en la sierra del mismo nombre, en Soria, es de origen glaciar y forma parte del Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión. Se ubica en el término municipal de Vinuesa, a 1.753 metros de altitud. La leyenda recogida por Antonio Machado dice que no tiene fondo y que comunica con el mar. El magnetismo de este paraje hace de él uno de los rincones más bellos de España.

Laguna de Gallocanta (Zaragoza y Teruel)

La laguna de Gallocanta se encuentra entre las provincias de Zaragoza y Teruel y en los términos municipales de Santed, Gallocanta, Berrueco, Las Cuerlas, Tornos y Bello. Abarca 1.924 hectáreas, lo que la convierte en la más grande de España, y está situada a 1.000 metros de altitud. Esta laguna salada que alberga una rica flora y fauna.

Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real)

Las Tablas de Daimiel, en la Provincia de Ciudad Real, conforman un conjunto de humedales declarado Parque Nacional en 1973. El nombre de este riquísimo espacio natural proviene del fenómeno natural que ha dado pie a su aparición: la confluencia de dos ríos que ocasiona un desbordamiento del agua sobre un terreno de escasa pendiente.

Lagunas de Ruidera (Ciudad Real y Albacete)

El conjunto de las Lagunas de Ruidera está formado por un total de 15 lagunas a lo largo de 15 kilómetros del valle del Alto Guadiana, en los límites de las provincias de Ciudad Real y Albacete, y conforma un Parque Natural que lleva su nombre y que alberga un gran número de especies de animales y plantas. Las cascadas que caen de unas lagunas a otras constituyen uno de sus elementos más atractivos.

Laguna de Fuente de Piedra (Málaga)

La Laguna de Fuente de Piedra, en Antequera (Málaga), es la más grande de Andalucía y una de las más extensas de España, con 1.364 hectáreas, seis kilómetros de largo y dos de ancho. Este espacio de agua salada es un lugar de encuentro para miles de aves migratorias y consigue reunir a la mayor colonia de flamencos de la Península.

Laguna de Torrevieja (Alicante)

La Laguna de Torrevieja forma parte del Parque Natural de las lagunas de La Mata y de Torrevieja, en la comarca de la Baja Vega del Segura y destaca por una peculiaridad que la hace única: el color rosáceo que toman sus aguas en verano. El tono se explica por diferentes motivos, entre ellos las algas y bacterias que crecen en la laguna o, al parecer, la capa de arcillas de su fondo.