Tras unos años sin fiestas por culpa del Covid, se acerca el verano y con él el retorno de uno de los eventos que más disfrutamos los asturianos y que más tiempo hemos estado esperando, las fiestas de prao. Por ello, hoy te presentamos un recordatorio de cinco fiestas de prao que no te puedes perder y que una vez más, no decepcionarán:

El Carmín

Conocida popularmente como el Carmín de la Pola, el 18 de julio se celebra el día grande de la festividad de Nuestra Señora del Carmen y Carmín. Son las fiestas principales de la parroquia de Pola Siero, que se remontan al siglo XVII, aunque ahora poco tiene que ver con lo que era antes, festividad en la que se celebraban procesiones, danzas y la exhibición de 'Ramos', tradición que se perdió alrededor de 1879. En esta fiesta la gente se reúne desde bien temprano para comer, beber sidra sin parar y disfrutar de las orquestas nocturnas, un evento que ha sido declarado Fiesta de interés turístico del Principado de Asturias.

Xiringüelu

La fiesta tradicional de la Villa de Pravia. Se inició en 1940, época de postguerra, un tiempo en el que no se celebraban festividades, pero gracias a una tertulia que se realizó en el bar 'La Cueva', la gente decidió que era momento de salir a la calle y de empezar a festejar, por lo que de una romería familiar ha pasado a un fenómeno nacional. La característica más distintiva de esta fiesta de prao es la construcción de las casetas en parcelas previamente reservadas por las peñas. Además de las casetas, se congregan en el prao una multitud de gente que, por ejemplo, en el último año que se celebró, reunió a más de 40.000 personas. El 7 de agosto se convierte por ello es una de las fiestas cumbre del verano.

La Jira de Navia

Otra fiesta que lleva más de un siglo celebrándose. El 17 de agosto se reúne en el Pinar de Navia una gran multitud de personas para disfrutar de la sidra en una calurosa jornada en la que también se puede disfrutar de la música gracias a las discotecas móviles. Este día no para de reunir a más y más gente, y es que echando un vistazo a su historia, esta fiesta que originalmente se celebraba en 'El Cubo' , tras el paso de los años se tuvo que cambiar varias veces de ubicación a causa de su masificación, hasta que finalmente se consolidó en el pinar. Una fiesta en la que no faltan las empanadas, los bollos, la sidra, la música y la buena gente.

San Timoteo

Las fiestas de San Timoteo empiezan la noche del 21 de agosto en Luarca con una gran verbena, no obstante, el día grande es el día siguiente, el 22 de agosto, día en el que se realiza una de las romerías más grandes de todo el verano. Su origen parte de 1910, año en el que se reunió un grupo de amigos un día de verano para compartir comida, sidra y cantares, hecho que dio lugar a esta fiesta multitudinaria. A las 10 de la mañana sale el 'refugayo', la romería, acompañada por charangas, bandas de gaitas, gigantes y cabezudos, despertando a todos los vecinos. Así es como se anima el camino al campo, trayecto en el cual las peñas suelen llevar consigo un carro lleno de sidra. Una vez llegados al campo prosigue la fiesta con la comida, la sidra y la música.

Romería de los Remedios de Porcía

Otro de los momentos más esperados del verano, el 8 de septiembre en Porcía, día en el que desde primera hora de la mañana comienza el gran festejo. Cada peña construye sus propios carros para transportar, como no, la protagonista de nuestras fiestas, la sidra. Se trata de una de las celebraciones más populares del occidente asturiano que de nuevo, consigue reunir a miles de personas.