El glamuroso truco de Georgina para no llorar cortando cebolla: "Muchas lágrimas"

Georgina Rodríguez le está dando caña a TikTok. Al igual que hizo en el reallity que grabó para Netflix ha decidido mostrar su lado más casero y cercano. Tanto es así que ha grabado su receta para hacer tortilla de patata (con truco para no llorar cortando cebolla incluído).

La mujer de Cristiano Ronaldo, sin mandil y con mucho glamur, muestra a sus seguidores cómo cocina ella la tortilla de patata. Aunque asegursa que le gusta más comer que cocinar, admite que la tortilla le encanta y "qué mejor que hacerla yo". Pela las patatas, corta la cebolla... y enseña su truco para no llorar: "os recomiendo que os pongáis una gafas de sol para evitar muchas lágrimas". Pero el truco no le funciona. Y admite: "Ni unas gafas de Channel evitan que llore".

"Voy a comprar gafas de Chanel para cocinar una tortilla", le dicen sus fans entre risas. El humor y la naturalida de Georgina son sus puntos fuertes. "No sé cómo hay gente a la que no le cae bien esta chica", comentan las seguidoras de la influencer.

Georgina no se esconde. Le encanta comer. También se declara fan de la fabada. Siempre que viene a visitar a su hermana, que vive en la región, se muestra fascinada con la gastronomía asturiana. El pasado mes de octubre, sin ir más lejos, disfrutó de una buena "fartura". Georgina Rodríguez y sus acompañantes comieron un menú típico asturiano, con el plato de fabada, cachopo y arroz con leche de postre. Todo regado por unos culetes de sidra, y la posterior visita al Llagar Trabanco de Lavandera, en el que se interesó por el proceso de producción, junto a Samuel Trabanco.

Por Lavandera pasó una jornada tranquila, en un pueblo que no llega a 300 habitantes censados, pero que ha tenido ahora una gran repercusión gracias al impacto entre los seguidores de Georgina en las redes sociales.

La exitosa empresaria y protagonista de la serie mencionada de Neftlix transmitió una imagen muy normal, familiar y cercana, e incluso bromeó con la posibilidad de llevarse las sobras de la comida. “Comió muy a gusto, disfrutó de la visita, estuvo muy familiar con los niños, y se trajo hasta un look muy para el día, para estar en el pueblo, en un día así lluvioso”, comentó Yolanda Trabanco, directora del restaurante, que subrayó también su atención por conocer el proceso de la elaboración de la sidra. “Le explicamos todo durante la visita y disfrutaron todos mucho. Es algo que se aprecia mucho fuera, y es curioso que muchas veces los de aquí nos interesamos por esto cuando traemos a alguien de fuera para enseñárselo”.