Una joven desaparecida cuando regresaba a casa de fiesta y la determinación de su hermana por vengar al agresor que ha salido impune con la ayuda de una espontánea justiciera es el punto de partida de la historia que cuenta 'Yrreal', la nueva serie del canal de RTVE Playz, que se estrena este miércoles, 17. Pero lo innovador de esta propuesta de suspense y 'girl power', ganadora del festival Conecta, es que la narrativa mezcla imágenes reales con animación 2D y estética de cómic, lo que la convierte en un producto muy apetecible para el público joven. Angy Fernández y Veki Velilla son las jóvenes actrices que dan vida a las protagonistas.

La propuesta de Alberto Utrera, realizador de la productora MOa Studio (que cumple una década), y su socio Nuño Benito, director de Animación, no es muy habitual en nuestro país, pero tiene un referente claro en la película estadounidense 'Kick-Ass'. “Sobre todo en el planteamiento, aunque ahí se vuelve más loco”, apunta. En la película, el protagonista es un chaval que decide luchar contra las injusticias del instituto, se compra un traje en Amazon y de convierte en un superhéroe. Algo similar a lo que le pasa a Lucía (Angy), que colocándose una máscara (quién diría que todos la acabaríamos llevando), se siente capaz de acabar con quienes supuestamente han hecho desaparecer a la hermana de Elena (Veki).

Los elementos propios del cómic tienen doble función. “Desarrollar esa cabeza de Lucía, pero también es estéticamente un recurso que podía llamar la atención a primera vista”, confiesa el realizador. Y es lo que llevó a Santiago Segura --además de su amistad con Angie--, a acercarse a uno de los pases tras ver las impactantes imágenes del tráiler y recomendarla en Twitter.

Las actrices

La elección de las actrices es uno de los grandes aciertos. Fernández, con su pelo naranja y su físico entre punk y aniñado, resulta perfecta para ser plasmada en un personaje de animación, mientras que Velilla aporta ese aspecto frágil que tanto descoloca cuando su personalidad se transforma. “Elena está tan al límite que, cuando Lucía le propone algo tan loco, se puede dejar arrastrar a sitios de los que, si no tienes cuidado, no hay vuelta atrás”. Y esa huida hacia delante a lo Thelma y Louise que viven las chicas está salpicada de violencia y de momentos que rayan lo gore.  

Ayuda a definir el ritmo trepidante de las secuencias, el suspense y la comedia negra, la banda sonora de la serie, que se acompaña de sonidos estruendosos al adoptar la estética de cómic. “Hay veces que aumenta la tensión y otras veces la aligera”, explica Utrera. Una de las melodías escogidas, la que coreografía una de las escenas más violentas, 'La dona é móbile', salió después de probar un montón de géneros. “El rock era excesivo. Tampoco el pop pegaba. Y surgió la ópera. Los contrastes siempre funcionan. Y al meterle esa canción a una escena con toques de gore, adquiere otra dimensión”, explica.

La ficción de Playz, que acaba de ganar un Ondas por sus contenidos, consta de seis capítulos de 20 minutos, una duración que solo aporta ventajas: “Es una tendencia innegable, ya hay series de 10 minutos. Nos gustaba la duración de 25 minutos, como 'The End of the Fucking World’, de Netflix, porque hay unan trama central y no hay que desarrollar subtramas. Hay un mensaje claro”, dice. Y facilita el consumo: “Te las puedes comer en una tarde”, asegura. “Hay tanta oferta que la gente no quiere hipotecarse en capítulos de una hora”, valora. “Y si en Tit Tok se cuentan historias de 30 segundos…”, añade.