Llega a la cita montado en su skate, del que nunca se separa. Le comentamos nuestra preocupación porque el skatepark de la Marbella está lleno de gente patinando y nos tranquiliza: “No hay problema, ellos lo entienden. Están acostumbrados”. Y no lo hubo. El respeto entre ellos es máximo y algunos aprovechan para saludar a uno de los más grandes de este deporte: Danny León

De entrada nos cuenta que está “emocionado y con ganas de ver cómo van a ser los primeros Juegos Olímpicos para el skate”. Para Danny es toda una incógnita como será la competición ”pero vamos a estar ahí por primera vez y estoy orgulloso de ser el primero”, asegura.

León patina desde que era un niño y construyeron un skatepark en Móstoles, donde nació. Su talento le llevó a tener sponsors y a disputar las competiciones más importantes del mundo, pero poco se imaginaba que acabaría en unos Juegos Olímpicos. De hecho aún está algo incrédulo: “Estamos acostumbrados a que nos echen de los sitios por patinar, que la policía nos multe y que hacer un skatepark no sea un proyecto de un ayuntamiento así que de repente ver que es olímpico fue increíble. Poco a poco me lo voy creyendo pero todavía esto esperando a estar ahí para decir: es verdad, estoy en unos Juegos”.

En cuanto al debate de si unos Juegos pueden incidir en la esencia del skate, Danny lo tiene claro: “La esencia son los skaters quienes la mantienen. El mundo del skate va a seguir igual, pero lo bueno es que aunque no sea puro 100% skateboarding nos va a dar una visibilidad que nos ayudará a evolucionar y el mercado crecerá en todos los sentidos”.

Lógicamente nunca entró en sus planes ir a unos Juegos, aunque ahora vive con la ilusión de ir a Tokio:“Al principio entre comillas me daba igual que fuera o no olímpico porque yo voy a seguir patinando hasta el día que me muera, pero ahora mi objetivo, con una federación de por medio, ha cambiado.Tengo que prepararme, aprender a profesionalizar nuestro deporte, ponerme fuerte, hacer cierta rutina, cuidarme más. Es la competición más esperada y mi mentalidad no es ir a intentar hacer un pódium sino ir a quedar primero, a ganar. Voy a intentarlo todo y si fallo será habiéndolo intentado todo”.

El skater mostoleño solo necesita dos cosas en Tokio “con mi música y mi skate me vale” y con ello intentará sorprendernos: “Tengo un par de trucos estrellas míos y voy a intentar hacerlos en los sitios más grandes y lo más grande que pueda. Yo lo que más suelo hacer es algún truco raro y aéreos. Intentaré saltar con todo el estilo que pueda y hacer algún truco técnico”, explica Danny que tiene claro que la clave está en “no ponerse límites en la cabeza. En una competición la clave es ser creativo y sacar algo nuevo que no se haya visto para sorprender a los jueces”.