La selecciones de balonmano de Argentina y Brasil no pudieron romper los pronósticos y comenzaron su andadura en los Juegos de Tokio con una derrota, tras caer este sábado ante Francia (33-27) y Noruega (27-24), dos de las máximas aspirantes a la medalla de oro.

Una derrota que en el caso del conjunto argentino, que dirige el técnico español Manolo Cadenas, se fraguó en el tramo inicial de la segunda mitad en el que los sudamericanos encajaron un contundente parcial de 6-0, que dejó sin ningún tipo de opción de victoria a los Gladiadores.

Ni el buen trabajo del central Diego Simonet, máximo realizador del partido con 8 tantos, pudo impedir la escapada del equipo francés, vigente subcampeón olímpico, que de la mano de un acertado Melvin Richadson, nuevo jugador del Barça, se situó con una renta de ocho goles (21-13) a los diez minutos de la reanudación.

Diferencia que la selección argentina, vigente campeona panamericana, no logró reducir, como reflejó el 33-27 final, ante el oficio y el talento de una Francia que dejó claro que llega a Tokio dispuesto a lograr el oro que se le escapó en los pasados Juegos de Rio.

Más cerca de dar la sorpresa estuvo Brasil, en un encuentro en el que los sudamericanos llegaron a tener una renta de hasta cuatro goles 6-10 en el primer tiempo.

Desventaja que pareció hacer reaccionar a Noruega, plata en los Mundiales de 2017 y 2019, que de la mano, como no, del central Sander Sagosen logró reducir la diferencia a la mínima expresión (9-10) a falta de cinco minutos para llegar al descanso

Un receso que no pudo sentar mejor a Sagosen, considerado por muchos como el mejor jugador del mundo, que con cuatro goles consecutivos en el arranque de la segunda mitad permitió a Noruega lograr un parcial de 6-1 que posibilitó la fuga (18-15) de los nórdicos.

Renta que ni los goles del lateral Haniel Langao, que cerró el choque con cinco dianas, lograron reducir como demostró el 27-24 final por el que los noruegos de alzaron con la victoria.

Una derrota de la que Brasil tendrá difícil poder desquitarse el próximo lunes ante Francia, el próximo rival del equipo brasileño, mientras que Argentina se enfrentará con Alemania, bronce en los Juegos de Río 2016.