Las matemáticas no mienten, aunque en España hasta es posible ese absurdo. El PP asturiano dice que faltan 900 millones de euros de los fondos mineros porque no llegaron o se esfumaron por el camino o, ya estando aquí, volaron misteriosamente. Si en Andalucía han robado en los ERE -ya saben: copas, putas y drogas... progresistas, claro- bastante más, no hay que extrañarse de que aquí esté en paradero desconocido esa cifra inmensa. Habrá que mirar en la agenda rosa de la «operación Marea». Por otra parte, Foro ha logrado que in extremis se pidan -o se reclamen, porque están concedidos- más de 1.000 millones de euros del mismo concepto minero o similar, que el Gobierno socialista astur no había tramitado.

Conclusión: con los recortes que se quiera, porque no afectan a esas partidas -son previas-, Asturias tiene pendiente de cobro 2.000 millones de euros además de las normales transferencias, ayudas, dineros y apoyos del Estado a la comunidad autónoma.

O aparecen los 2.000 millones, o aparecen los ladrones, o aparecen los mentirosos y/o aparecen los que están en vías de burlarnos. Ésa es la cuestión.

La cifra es elevadísima y más con esta terrible crisis en curso. Y la palabra la tiene el Gobierno de Rajoy sea investigando los presumibles atracos o haciendo honor a los compromisos. O las dos cosas, porque de todo debe haber y para todo tipo de acciones hay cabida.

La suerte de Asturias para unos cuantos años se juega en esta doble partida. O la ganamos plenamente, o todo lo malo visto hasta ahora no será apenas nada en comparación con la pesadilla que nos espera.