Soldados, marineros y aviadores de la fuerza expedicionaria aliada. Estáis a punto de embarcaros en la gran cruzada para la que nos hemos preparado durante muchos meses. Los ojos del mundo está puestos sobre vosotros". Con estas palabras comenzaba la alocución que el 5 de junio de 1944 lanzaba el general Dwihgt W. Eisenhower, comandante supremo del mando aliado, al despedir a los soldados de la 101.ª y 82.ª divisiones aerotransportadas americanas, cuando en sus C-47 "Dakota" despegaban de los aeródromos ingleses camino del sur de la península de Contentin. Así daba comienzo la operación militar más grande que el mundo ha conocido: el Desembarco en Normandía, el Día D.

Un poco más tarde, desde la BBC, se emitía para la Francia ocupada los ya famosos versos de Paul Verlain de la "Canción de otoño": "Los largos sollozos de los violines del otoño/ Hieren mi corazón con una monótona languidez". Eran las palabras clave dirigidas a las Fuerzas Francesas del Interior para que comenzasen sus acciones de sabotaje pues la ansiada invasión de Francia por parte de los aliados tendría lugar el día siguiente.

A medianoche, las tropas aerotransportadas americanas y británicas comienzan a ocupar los flancos oriental y occidental de la zona de desembarco.

A las 06.30 horas las primeras barcazas americanas se acercan a las playas del desembarco, Omaha y Utah, nombre en clave de las playas de Coleville-sur-Mer y la Madeleine, respectivamente. Las tropas de la 4.ª División de Infantería americana, que son la punta de lanza de la playa de Utah, se hacen con el control de su cabeza de puente en poco tiempo y sin apenas resistencia y consiguen enlazar con las tropas aerotransportadas americanas hacia el mediodía. Mientras el curso de las operaciones era francamente alentador para los aliados en Utah, la situación de la 1.ª y la 29.ª divisiones americanas en Omaha se complicaba por momentos según las oleadas de tropas llegaban a la playa sin tener espacio para protegerse o desplegarse. Las tropas alemanas del 916.º Regimiento de Infantería de la 352.ª División de Infantería, pese a tratarse de soldados que habían sido incorporados en las últimas levas por contar la mayoría de ellos con enfermedades relacionadas con el estómago, oponían una tenaz resistencia a lo largo de toda la playa. A las 11.30 horas un grupo de hombres de la 29.ª División americana consigue abrir una brecha en el promontorio de Verville por la que va a penetrar gran parte de los efectivos de la división.

Una hora después de iniciarse el desembarco americano, las lanchas vomitaban sobre las arenas de la playa de Arromanches fuerzas británicas de la 50.ª División de Infantería, que en poco tiempo se harían con toda la cabeza de puente de la playa apodada "Gold". A su izquierda, las tropas de 3.ª División de Infantería canadiense conseguían hacerse con todos los objetivos de la playa denominada en clave "Juno" hacia las 11.30 de la mañana, cuando consiguen aplastar la última resistencia alemana en Courseulles. Mientras tanto, la 3.ª División de Infantería británica y comandos franceses peleaban por hacerse con el control de Ouistreham, tras su desembarco en la playa denominada "Sword".

Hacia el mediodía de aquel 6 de junio las cabezas de puente en los cinco puntos de desembarco están aseguradas, aunque de una forma muy débil. A esas horas, se debate en el cuartel general alemán sobre si ésta es la acción principal o una mera acción diversiva y la principal tendría lugar en las proximidades de Calais. Los mariscales Von Ribentrop y Rommel comienzan a darse cuenta de que realmente se trata de la acción principal y solicitan al propio Hitler la utilización de todas las reservas acorazadas en el sector de Normandía. Hitler se niega, ya que está convencido de que el desembarco principal se efectuará por Calais. Efectivamente, la "operación Fortitude" diseñada por los aliados creando ejércitos imaginarios, como el I Grupo de Ejércitos de Estados Unidos al Mando de George S. Patton, los había engañado a él y a su cuartel general.

No obstante, por la tarde, la reorganizada 21.ª División Panzer que había formado parte del Afrika Korps entra en acción contra las tropas británicas y canadienses consiguiendo evitar que las cabezas de playa de "Juno" y "Sword" se uniesen y que sus efectivos tomasen Caen, como estaba previsto en los objetivos aliados para el Día D. Los días siguientes, pese a la negativa de mandar toda la fuerza acorazada a Normandía, los alemanes despliegan las divisiones acorazadas "Hitler Jugend" y la "Panzer Lehr" consiguiendo frenar el avance aliado. La dura resistencia alemana impedirá que todas las cabezas de puente consigan unirse hasta el 13 de junio. Ese día, podemos decir que acababa el desembarco pero comenzaba la mucho más dura batalla de Normandía. Los prados, colinas y setos normandos sirvieron a las tropas alemanas para mimetizarse con el terreno evitando en parte la acción destructora de la aviación aliada, dueña absoluta de los cielos, lo que obligaba a las tropas aliadas a tener que librar una lucha muy enconada que se conocerá como la "batalla del bocage". La dureza de la batalla de Normandía nos la indican las propias fechas: la fortaleza de Cherbourg no capitulará hasta el 27 de junio; Caen no será tomada por las fuerzas británicas hasta el 9 de julio.

Pese a la incesante llegada de hombres y material por las playas y puertos artificiales construidos al efecto, los aliados se percatan a principios de julio de que un ataque directo hacia París los obligará a una encarnizada batalla, ya que para esas fechas los alemanes han decidido emplear todas las reservas en Normandía. El cuartel general aliado decide iniciar una acción hacia la costa tomando Avranches. La acción la inició el I Ejército Americano y la continuará el III Ejército Americano de Patton llevando a cabo una gran acción envolvente hacia el Sur, consiguiendo atacar por su retaguardia al grueso de las tropas alemanas que oponía dura resistencia a los anglo-canadienses en el sector de Falaise. La conocida como "bolsa de Falaise" será una derrota poco conocida, en la que el ejército alemán sufría un descalabro similar al de Stalingrado. Una vez derrotado el grueso de las tropas alemanas el 14 de agosto, las puertas de París estaban prácticamente abiertas para los aliados. Serán los efectivos de la famosa Novena Compañía, formada por republicanos españoles encuadrados en la 2.ª División Blindada francesa de Leclerc, quienes hagan la entrada triunfal en la Ciudad de la Luz.

El Desembarco de Normandía no supuso, como casi toda la historiografía afirma, la apertura del segundo frente sino de un tercer frente, ya que, aparte del oriental, también estaba el frente italiano. Ahora bien, la batalla de Normadía consiguió acelerar notablemente el final de la guerra, pero la región gala tuvo que pagar un alto precio, la práctica destrucción de sus principales ciudades y pueblos, así como sus infraestructuras.

En su 70.º aniversario, todos debemos seguir rindiendo un homenaje a aquellos jóvenes, hoy nonagenarios, que con su sangre y esfuerzo consiguieron liberar Europa del yugo germano.