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LNE FRANCISO GARCIA

Billete de vuelta

Francisco García

El pueblo en su Casa

Que una convocatoria de los "sanchistas" en demanda de que la gestora del PSOE convoque de inmediato las primarias y el congreso nacional del partido llene la Casa del Pueblo de Gijón es señal de buena salud política, para ludibrio de aquéllos que anhelan ver al partido socialista con un pie y medio en la morgue.

Independientemente de las razones de esa convocatoria, sin duda numerosa, aunque por lo que se ve en las fotos claramente veterana, con muchos menos jóvenes que sexagenarios, lo más destacado de la reunión es el aire fresco que para la Casa del Pueblo supone el debate abierto y público. Si las sedes socialistas recuperan su viejo sentido inicial como espacio identitario, el PSOE podrá plantearse seguir liderando la izquierda, y frenar la caída libre.

Las casas del pueblo son edificaciones de cuño socialista. Otros también bautizaron a sus sedes con el mismo nombre: anarquistas, radicales lerrouxistas y hasta grupos católicos de la órbita social-cristiana. Pero es el socialismo quien consolida el término y con el que adquiere entidad. Lo que otros llamaron "casas" no dejaron de ser "círculos", "casinos" y "ateneos" .

¿Cómo es posible que el PSOE, teniendo una red nacional de casas del pueblo, no las tengas abiertas al pueblo de par en par y las dedique sólo a cuestiones internas? Tal vez muchos militantes socialistas buscaron en los círculos de Podemos y en las asambleas del 15-M lo que les impedía el candado en la Casa del Pueblo. Cuando Pablo Iglesias, el primero, las abrió, era con ese fin: reunión, formación y concienciación política. Aquel Pablo Iglesias era Podemos, en su momento.

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