Ricardo: "Después del atentado en Manchester que costó la vida a tantos inocentes, en las redes sociales empezaron a aparecer bulos lanzados por gente miserable que se inventaba falsos desaparecidos y llamamientos engañosos para acumular retuits, llamar la atención y poder sacar pecho con el eco obtenido por su 'hazaña' cruel y rastrera. Si una tragedia de proporciones tan brutales te pone cara a cara con el mal en estado puro encarnado por fanáticos capaces de asesinar a sangre fría a personas desprevenidas y desprotegidas, también te desvela perfiles oscuros de seres sin conciencia que son capaces de aprovecharse de la desgracia ajena para alimentar sus más bajos instintos o hinchar su ego virtual captando un interés que, de no mediar esas prácticas abyectas, nunca podrían conseguir.
Los siglos pasan, pero las monstruosidades sólo cambian de velocidad para expandirse. Todos tenemos teléfonos móviles ultramodernos y en muchos casos no los usamos para comunicarnos, sino para todo lo contrario: mira a toda esa gente que está más pendiente del último mensaje que de hablar con su familia cara a cara. Yo pensaba que las redes sociales serían una herramienta extraordinaria para acercar a los pueblos, para transmitir valores de justicia y respeto, para extender la cultura y hacernos a todos más activos y responsables en busca del bien común. Que facilitarían el acceso a un compromiso colectivo de humanización extrema donde se pusieran límite a las manipulaciones de los poderosos y los desmanes de los criminales. Pero lo que más veo en ellas cuando entro es vanidad, egoísmo, frivolidades en masa, linchamientos y falsedades. E incluso cuando una ciudad, pongamos Manchester, se enfrenta al mal en estado puro, bajo la corriente de solidaridad surgen carroñeros que encuentran en los vertederos virtuales la comida que necesitan para alimentarse, sin que los dueños de esas redes sociales que se enriquecen a costa del trabajo gratuito de sus millones de sus usuarios hagan nada para impedir que la peste se propague contaminando todo lo que pillan a su paso".
