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Eduardo Lagar

Tan sencillo, barato y bien ideado

Casado, Jovellanos y los hórreos

Da como repelús salir a escribir en defensa del hórreo asturiano ahora que Pablo Casado proclama que eso está mal. El líder del PP manchó la proclamación de sus candidatos al Principado y al Ayuntamiento de Oviedo con una "boutade" -iba a escribir "babayada"- de las que hacen época. Descalificó a todo el sistema educativo de Asturias porque, según esa visión suya de explorador colonial y liberal "sin complejos", los indígenas ástures tenemos a los niños estudiando sobre frixuelos y hórreos en vez de explicarles quiénes fueron Jovellanos y Argüelles. ¿Sabe él quién fue Jovellanos? Se ve que Casado, o el que le escribe los chistes, no lo han leído. De otra manera, habrían sido más prudentes y respetuosos y sabrían que fue precisamente el polígrafo gijonés el primer gran defensor del granero asturiano. Sabrían con qué precisión, como todo en Jovellanos, y admiración habló el ilustrado sobre "un edificio tan sencillo, tan barato y tan bien ideado". Un edificio, dijo, "en que la forma, la materia, la composición y descomposición, la firmeza, la movilidad" son "tan admirables como sus usos".

Babayada por babayada, cabría preguntarse si semejante comentario fue un ataque de clasismo -ese desprecio del burguesito a lo rural, ese pateo en la ópera de Oviedo a la megafonía en llingua- o si los trajes entalladinos limitan tanto el riego cerebral como parece. El liberal, siempre tan atento al balance de resultados, habría de saber que la defensa del hórreo es económicamente muy rentable. Ese granero, entre otros elementos, distingue el paisaje asturiano de cualquier otro que exista en el mundo: lo convierte en algo nunca visto. Y el paisaje es, junto a la gastronomía, el principal factor de atracción del turismo en Asturias. Y el turismo representa el 11% del PIB regional. Así que, aunque sólo fuera por eso, deberíamos preocuparnos por su conservación.

La Consejería de Cultura lleva dos años con una comisión abierta para hacer una nueva regulación que permita dar nuevos usos a estos graneros, inservibles desde que se inventaron las neveras. Por eso se caen: porque no tienen función. Ojalá algún día ese cambio se haga realidad. Porque en esa Consejería parece que sólo se dedican a hacer frixuelos... Uy, perdonen la babayada. Todo se pega.

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