La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Xuan Xosé Sánchez Vicente

Peculiares, sí somos

La contradicción entre el proclamar y el ser

En los últimos meses los asturianos venimos confesando al CIS que somos los más "rebecos" de España o, en otros términos, "los más apolíticos y abstencionistas de España", citando un titular al respecto de LA NUEVA ESPAÑA. En concreto, somos quienes estaríamos más dispuestos a no votar en unas próximas generales, duplicando la media del país; los segundos en manifestar que no tenemos ningún partido "próximo" a nuestro pensar o sentir; la mayoría de los encuestados sostiene que de todos los posibles aspirantes a presidente no quiere a ninguno; nada menos que un 34,7% de los encuestados se manifiesta como "apolítico".

¿Y cómo se compadece eso con que, a la hora de la realidad, votemos en número semejante a como lo hacen en otras regiones? Es más, ¿cómo es posible que quienes han votado al PSOE en las elecciones generales sean quienes peor valoren a Pedro Sánchez?

Recordarán ustedes encuestas muy recientes relativas a nuestra identificación "nacional". Pues bien, de todo el Estado somos los más desafectos a España, y más nacionalistas que vascos, catalanes o gallegos. Venimos galleando de ello desde siempre.

Votamos tanto como los demás, pero decimos que no; lo hacemos a los que no queremos ver; y a aquellos con los que nos sentiríamos identificados no lo hacemos nunca o sólo en escasísima medida y en raras coyunturas.

Ocurre lo mismo con los que están a favor del asturiano o la cooficialidad. Las encuestas dan un número altísimo de entusiastas. Acerquen un micrófono a un falante, arrímenlo a una ventanilla y el asturiano huirá de sus labios como el diablo del agua bendita.

¿A qué se debe tanto "flatus vocis", tanta contradicción entre el proclamar y el ser?

Algunos quieren, supongo que por eutrapelia, relacionar este comportamiento contradictorio con la presencia de algunos genes particulares entre nosotros, como el raro gen "L3flb6" de origen africano.

En todo caso, peculiares, sí somos.

Compartir el artículo

stats