Fue el exconseller Forn quien en su declaración, desde el banquillo de los acusados en el tercer día de la vista oral, reprochó a la Fiscalía que "construya relatos peliculeros". Aludía, el responsable político de los Mossos cuando ocurrieron los hechos sobre los que el Ministerio Público intenta sustentar su acusación de rebelión, a la forma en la que Montserrat del Toro, la secretaria del juzgado número 13 de Barcelona, encargada de dirigir y levantar acta del registro en la Conselleria de Economía, tuvo que abandonar pasada la medianoche las dependencias oficiales. El relato, con el fiscal Zaragoza como conductor fue una exposición muy organizada, detallada y ribeteada por muchos apuntes personales de la declarante. Del testimonio se desprende que hubo inhibición de los Mossos pese a las tempranas advertencias de la concentración que se estaba gestando; que Sánchez y Cuixart lideraban la masa, eran los interlocutores con los que se negociaba su salida, fijaban condiciones; y que existió un bloqueo efectivo. Sànchez, sobre el que pesa una petición de diecisiete años de prisión, siguió la declaración risueño a ratos. Cuixart mantuvo su gesto habitual, propio de alguien en permanente levitación, como si la libertad ya le importara poco. La reacción de las defensas fue muy distinta, quizá porque percibieron que el supuesto "relato peliculero" podía ser uno de los determinantes de la vista oral. Y eso que llegaba después de, en palabras del presidente Marchena, la "declaración esencial" del roqueño De los Cobos. Los abogados no consiguieron abrir fisuras en el testimonio, una veces desperdigándose hacia detalles del registro, ajenos a la causa, otras buscando el cuerpo a cuerpo con la testigo con indagaciones improcedentes sobre su perfil ideológico para intentar la degradación de lo escuchado en la sala. Todo ello porque quedó patente un hecho incontrovertible: la secretaria judicial no pudo salir por la misma puerta por la que entró. Si en los impedimentos hubo violencia o sólo intimidación es uno de los asuntos centrales de la causa.
