No le quedan muchas opciones al Gobierno de la nación de aprobar en el Consejo de Ministros, antes de las elecciones generales del 28 de abril, el convenio del plan de vías de Gijón. Una vez que la reunión del gabinete de Pedro Sánchez no incluyó el asunto que más preocupa en este momento a esta ciudad en el orden del día, no quedan más opciones que la convocatoria del próximo viernes, 12 de abril, y el Consejo a celebrar en Semana Santa, en fecha por determinar, a una semana de los comicios para elegir a diputados y senadores.

La demora en la firma del convenio provocó esta semana el encierro en el Ayuntamiento de un grupo de líderes vecinales de Gijón, quienes, durante 75 horas, permanecieron en el salón de plenos en espera de un compromiso firme en favor de un acuerdo que antes de aprobarse por la sociedad Gijón al Norte tiene que avalar el Ejecutivo. Reclamaban los vecinos una fecha concreta para la firma y no la obtuvieron, solo la certeza, en palabras de la delegada del Gobierno, Delia Losa, de que el asunto se aprobará antes de la llamada a las urnas, lo que ya habían anunciado con antelación tanto el consejero de Infraestructuras del Principado, Fernando Lastra, como la candidata del PSOE a la Alcaldía de Gijón, Ana González. Según la delegada del Gobierno, todos los informes preceptivos de Adif y de los ministerios de Fomento y Hacienda ya están completos y solo resta el preceptivo de la cartera de Política Territorial.

Entramos en una doble campaña electoral, la de las generales de finales de abril y la de las elecciones autonómicas y locales de mayo, y tan importante como aprobar el convenio será arrancar de los contendientes en la batalla política el compromiso de cumplimiento de los acuerdos adoptados en marzo del pasado año por las tres administraciones afectadas por el proyecto ferroviario de Gijón. La inversión prevista alcanzará los 814 millones de euros, al añadir a la del plan de vías los 313,66 millones que Adif va a destinar a la puesta en servicio del túnel del metrotrén (86,64 millones) y para la prolongación hasta Cabueñes (207,02 millones). En total, la aportación directa de Adif, incluyendo los 140,16 millones de euros de la estación de cercanías, ascenderá a 453,82 millones. Los números son más relevantes que la firma del convenio, por mucho que sin convenio no habría partidas presupuestarias. E importan también los plazos, por cuanto el pacto data en 2022 y 2023 el grueso de la inversión.

Todo lo que sea rebajar las previsiones del gasto anunciadas por el último ministro de Fomento del Gobierno de Rajoy se convertiría en "casus belli" para Gijón, cuyos ciudadanos llevan más de una década aguardando la culminación de un proyecto aún en mantillas que amenaza con eternizarse.