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Mariola Riera

Radio Patio

Mariola Riera

Guerra de pinchadiscos

Del "Piensa en mí" de Luz Casal al "Bailando" de Alaska

De repente, el patio se ha venido arriba hacia el mediodía. Guerra de pinchadiscos. Tal cual. Dicen que cuando el diablo está aburrido espanta moscas con el rabo. Pues aquí ha decidido ponerse a los mandos de la megafonía.

La banda sonora del confinamiento patrio tiene un hit indiscutible, el "Resistiré" del "Dúo Dinámico". Manuel y Ramón han dicho en alguna revista del quiosco rosa que están "encantados" de servir de inspiración y sostén a los españoles. A partir de esta melodía que, hay que reconocerlo, viene como anillo al dedo al estado de alarma -sobre todo, a los que viven en pisos, pues los de pueblo no tienen tiempo a perder el tiempo cantando ya que, como poco, deben mantener a raya la maleza del jardín-, la lista es variada.

Lo dicho, al mediodía el patio de luces o más bien sus inquilinos se revolucionaron con la música. Abrió fuego uno de un primer piso de manera contraproducente. Casi pone a todos a llorar. Le dio por sintonizar al alto la lleva "Piensa en mí", versión desgarradora de Luz Casal. Terrible. Fue a peor: el Adagio de Albinoni (¿o era la marcha fúnebre de Chopin?). No, no puso por ejemplo "La Primavera" de Vivaldi, que bien podría ayudar, aunque también derrumba escucharla entre cuatro paredes.

Afortunadamente alguien reaccionó a tiempo para frenar en seco al triste vecino antes de que hundiese la moral a todo el patio de luces. Y se hizo la luz con Alaska: "A quién le importa", "La funcionaria asesina", "Mi novio es un zombi", "Bailando"... El primer pinchadiscos pilló el mensaje y calcó el "stop" de su aparato de música. El segundo, logrado el objetivo, hizo lo mismo.

Ya pasaba con creces de la una de la tarde y en el patio de luces se empezó a oír el ruido de platos, cubiertos y cacerolas. Llegaba la hora de comer. Un almuerzo más del confinamiento. Muchos han perdido la cuenta de cuántos van. A saber cuántos quedan.

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