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El efecto llamada que inundó el Paraíso Natural

De la incertidumbre al mejor verano de la historia reciente en el área de Picos de Europa

Cuando hace un par de meses la preocupación rondaba por la cabeza de la inmensa mayoría de los empresarios y trabajadores del sector turístico nadie hacía presagiar que las cosas se tornarían para mejor hasta desembocar en el mejor verano de la historia reciente en la comarca del Oriente de Asturias. El "oasis" a nivel nacional del Covid-19 se convirtió durante 45 días seguidos en la panacea y, por fortuna, aún perdura por estos lares ese movimiento de gentío. Ahora, visto lo visto y en previsión de rebrotes de calado, salta a la palestra la primera "amonestación" del Principado a cinco concejos; después, me imagino, se saltarse la norma será la tarjeta "roja", o sea, el indeseado confinamiento. Digo yo.

El dilema de la desembocada situación que estamos viviendo en este verano del coronavirus en Asturias pasará a los anales de la historia. Si, por una parte, todo comenzaba con la cancelación del Descenso Internacional del Sella, la fiesta por antonomasia, y con ella la incertidumbre y un más que sombrío panorama, la cruda realidad es que parece ser que hubo cinco Semanas Grandes para deleitarse del páter Sella, o lo que es lo mismo, cinco Descensos -no internacionales ni competitivos- a pleno rendimiento. Hablar de cifras puede resultar descabellado, pero ¿se imaginan más de 120.000 palistas a lo largo de la campaña estival surcando sus aguas?

Cuando años atrás se hablaba y escribía de la necesidad de evitar "masificar" la actividad algunos políticos con mando en plaza negaban la evidencia. Esos mismos dirigentes ahora se echan las manos a la cabeza tras realizar un efecto llamada para que el turismo nacional -el tema de extranjeros ya sabemos que era otro cantar- acudiese a pasar sus vacaciones al Paraíso Natural. Lo que parecía una broma resultó todo un "boom" que nos cogió con el pie cambiado. Un turismo de masas; un turismo de todo tipo; un turismo "gasóleo" -andar mucho y consumir poco-; un turismo que buscaba salir del antaño confinamiento.

Mientras unos ojos se centran en las canoas del Sella, en las colas para acceder al Mirador del Fitu, en las playas petadas de bañistas -pese a los controles y distanciamientos de seguridad-, en las terrazas atiborradas a la hora del almuerzo, en las llegada masiva de autocaravanas a la zona, en los "atascos" de visitantes en la Ruta del Cares y sendas montañosas, en la cantidad de rescates llevados a cabo en estas fechas por los servicios de emergencias -especialmente Bomberos de Asturias-,€€ El otro foco de atención estaba puesto en Los Lagos de Covadonga con su obsoleto Plan de Transporte. ¿Cifras? Parece difícil de calcular, aunque me atrevería a estimarlo en unas 200.000 personas, incluyendo buses-lanzaderas, taxis que operan en esa área de Picos y coches particulares. ¿Es soportable? Tengo serias dudas.

Por otro lado, mientras desde el Principado de Asturias sacan "tarjeta naranja" a cinco concejos del Oriente la Consejería de Cultura, Política llingüística y Turismo presentaba hace un par de dias, en Gijón ,el programa "Asturias a lo grande", una iniciativa que tiene por objeto "incentivar el consumo turístico durante los próximos meses, contribuir a desestacionalizar la demanda y apoyar la creación de productos, paquetes y experiencias", tal y como explicó el pasado martes, en la Villa de Jovellanos, la viceconsejera de Turismo, Graciela Blanco.

El proyecto, según el propio Principado de Asturias, es fruto de la colaboración establecida durante el estado de alarma entre el Principado y los principales agentes turísticos para afrontar la reactivación del sector en la fase de nueva normalidad. Así, la definición del programa se enmarca en los trabajos conjuntos que el grupo, constituido el pasado 3 de abril, ha desarrollado durante los últimos cinco meses.

"Asturias a lo grande" incluye 140 experiencias y actividades diferentes que podrán disfrutar quienes reserven dos o más noches de estancia, entre el 1 de septiembre y el 15 de noviembre, en alguno de los 300 establecimientos adheridos o agencias de viajes autorizadas. El coste de cada una de las propuestas se incluye en la reserva del alojamiento y no supone un incremento del precio.

Si, por un lado, existe una honda preocupación por la situación del Covid-19 y los rebrotes en Asturias, ¿por qué motivo se lanzan nuevas campañas de promoción turística? Algo no me cuadra. Eso sí, a partir de este fin de semana, sin Certamen del Queso de Cabrales, otro clásico evento del verano en el Oriente, las aguas volverán a su cauce, dado el regreso de turistas a sus respectivos lugares de origen. Toca hacer balance e ir olvidándonos de la "turismofobia". Como decía una amiga explicando la gran afluencia turística: "Cerrar la cuadra después que escapó el ganáu!!!".

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