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Jonathan Mallada Álvarez

Crítica / Música

Jonathan Mallada Álvarez

Soplo barroco

Excelentes resultados del “Ensemble 1700”, Oberlinger y Sinkovsky en la Primavera Barroca

La Primavera Barroca sigue floreciendo en este mes de abril y nos regala sabrosos frutos en forma de concierto, en este caso de la mano del “Ensemble 1700”, el violinista y contratenor Dmitry Sinkovsky y la flautista y directora Dorothee Oberlinger. El extraordinario nivel demostrado por cada uno de los cuatro miembros de este ensemble son las mejores raíces posibles para crecer y desarrollar programas tan atractivos y complejos como el del miércoles.

El clavecinista Peter Kofler se lució en la luminosa “Ciaccona” de Bernardo Storace, del mismo modo que Marco Testori (violonchelo barroco) supo equilibrar en todo momento el sonido con sus compañeros y aportar una gran seguridad en los tempi y las armonías. Pero por encima de ellos, sobresalieron Sinkovsky y Oberlinger. El primero de ellos exhibió una gran versatilidad, encarando algunas obras como violinista y otras, como contratenor, utilizando los registros de cabeza y pecho en aras de una mayor expresividad, pero manteniendo siempre gran delicadeza y una buena afinación.

Oberlinger dio todo un recital con sus diferentes flautas de pico. La germana hizo gala de un espléndido virtuosismo en los pasajes más veloces (como en el último movimiento de la “Sonata nº 10 de Corelli), manteniendo una asombrosa articulación y logrando un sonido dulce y cálido. Saltos interválicos difíciles por su registro extremo y otros pasajes con un sonido más tenido donde mostró a su poderoso fiato, dejaron sin aliento al público ovetense durante hora y media. “Si dolce è il tormento” (Monteverdi) fue la guinda a este concierto que despeja cualquier atisbo invernal.

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