El nombre del presidente del Principado, Adrián Barbón, resuena en los mentideros políticos de la capital de España. Poco dado hasta ahora a prodigarse por Madrid, en los últimos días se ha multiplicado por los escenarios de la villa y corte. ¿Prepara el terreno para un hipotético salto a la arena política nacional? Si no está en la televisión pública comentando los resultados de las elecciones andaluzas, va de reunión en reunión ministerial como si no hubiese un mañana para sacarse más fotos. El jefe del Ejecutivo asturiano dio la cara por el PSOE en el especial informativo de Televisión Española del 19-J, actuando de comentarista junto a su homólogo murciano, Fernando Lopez Miras, del PP. La previsión era que compartiese plató con el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien finalmente anuló la cita ante el devastador incendio de la Sierra de la Culebra, en Zamora. El caso es que aumenta la exposición de Barbón mientras en los cenáculos y mentideros madrileños se conspira y habla de posibles relevos tanto para la alineación titular del Consejo de Ministros como para el propio seleccionador. En las quinielas se repite su nombre, en unos casos como ministrable, en otros incluso como posible alternativa al propio Pedro Sánchez para tomar las riendas del PSOE. Del listado de barones la mayoría no pasa el corte, ya sea por edad, por falta de empatía con las corrientes mayoritaria, por líos internos en su comunidad… Así las cosas, al final, ¿quién queda? Adrián Barbón, que para eso los asturianos somos los que mejor caemos al resto de los españoles, según dicen esas encuestas que tanto entusiasman al presidente tuitero del Principado. Sus visitas a Madrid, que hasta ahora solía dejar en manos del vicepresidente, Juan Cofiño, han acrecentado unos rumores que el propio interesado rechaza a todo el que le pregunta. Su teoría es que Juanma Moreno Bonilla arrasó en Andalucía porque los electores quieren estabilidad en estos tiempos convulsos y premian a los presidentes en ejercicio. Así que, en realidad, estaría esforzándose en reforzar su imagen de marca como dirigente autonómico de cara a las elecciones de dentro de un año. Sea por una razón o por otra, muy probablemente la multiexposición de Barbón vaya en aumento: se trata de un barón territorial de la oleada sanchista que se siente seguro en las encuestas. Las urnas (y las quinielas) dirán.
