Para cambiar

Cómo perder los ahorros

La quiebra de una importante plataforma de intercambio de criptomonedas

Herminio Huerta

Herminio Huerta

Leo con mucha pena las declaraciones de personas modestas lamentándose de que han sido víctimas de la quiebra –con una avería de quince mil millones que afecta a novecientos mil particulares– de una plataforma de intercambio de criptomonedas que se llama FXT con sede en Bahamas que viene a engrosar el "default" de la divisa Luna, el fondo Three Arrows Capital, las financieras especializadas en préstamos de criptoactivos: Lenders Celsius, 2gether, Voyager Digital y BlockFi que, entre todas, suponen mas de setenta mil millones de dólares difuminados y millones de víctimas atrapadas, muchas de ellas españoles. Pues, les aseguro queridos lectores, que la cosa no acabará ahí, ya que, estoy convencido de que se producirá una reacción en cadena como una onda expansiva, que arrastrará como piezas de dominó, a otras comercializadoras que ya empiezan a tener dificultades de liquidez como Binance, Coinbase y Génesis.

Ante este lamentable panorama que ha arruinado a cientos de miles de personas, hay que preguntarse: ¿pondría usted sus ahorros o parte de ellos –que tanto le ha costado juntar– en algún producto financiero que no entiende? Pues esto es lo que está pasando en el mercado con el bitcoin, el ethereum y otras muchas que existen, aunque menos famosas.

Miren ustedes, hasta para los más instruidos, es difícil de entender como se generan esas monedas virtuales, que es lo que representa su valor, como se asigna y como funciona su cotización en el mercado y quienes están detrás de las organizaciones (casi todas en paraísos fiscales) que mueven ese cotarro, así que todo es opacidad y falta de información financiera fiable. Ya dije hace cuatro años, en estas mismas páginas, que no confiaba en las criptomonedas pues no reflejan la generación de riqueza, ni tampoco tienen un ente oficial emisor, ni un organismo de control.

Aunque sea un ejemplo a nivel de párvulos, para que todo el mundo me entienda, el dólar está emitido y tutelado por la Reserva Federal, que responde de su moneda y, su valor esta respaldado por la creación de riqueza (PIB) de Estados Unidos. El euro, supervisado y emitido por el Banco Central Europeo, también representa la fortaleza del PIB de los países de la CE; lo mismo ocurre con la libra esterlina, el yen japonés etc.; pero el bitcoin, ¿por qué y por quien esta respaldado?, ¿quién lo supervisa?, ¿quién lo cuida?, ¿qué representa su valor?

Entonces, lógicamente, no nos puede sorprender que la mas salvaje especulación haya hecho presa de su cotización (perdió un 70% en menos de un año) y que sea un instrumento sometido a complejas y arriesgadas operaciones que han desembocado en estafas piramidales, esquemas Ponzzi, y quiebras y suspensiones de pagos porque actúa en un campo sin ley, sin normas, ni regulaciones con una ausencia total de controles corporativos. Es verdad que habría que distinguir la bancarrota de los intermediarios de la comercialización, de las propias monedas virtuales, pero con el desplome que ha sufrido su cotización en menos de un año pasando de sesenta mil a dieciséis mil, y la bancarrota de las empresas que lo compran y lo venden, ha sobrevenido una pérdida radical de confianza en el mercado por lo que los inversores ya no se fiarán para nada de este negro mundillo.

Como decía, los damnificados por el colapso que han perdido sus ahorros –con remotas posibilidades de recuperar algo– se cuentan por millones en todo el mundo y el fiasco es de tal magnitud que se ha esfumado la capitalización de dos billones de dólares del mercado cripto en el transcurso de este año que, para comparar, es bastante mas que el PIB anual de España. En fin, para no cansarles, termino insistiendo en que se trata de unos productos financieros en un entorno farragoso y difícil de entender, así que concluyo volviendo a preguntar: ¿ustedes meterían sus ahorros ahí?

Suscríbete para seguir leyendo