Dinero gilipollas

Sobra dinero y hay personas que lo entregan a una entidad que, si fuera persona, estaría diagnosticada de trastorno bipolar, que daña por igual cuando tira en la depresión que cuando eleva a la euforia. Eso es muy grave aunque se haya traducido vulgar, estúpida y alegremente como "montaña rusa emocional" para uso oral de intensos participantes de reality-show e imitadores.

La entidad es la bolsa. Su conducta es impulsiva (no mide las consecuencias), se mueve por la cobardía del dinero (que es miedoso, dicen los operadores), cree en rumores y aprecia a los gurús, en el sentido de maestros espirituales o jefes religiosos . ¿Qué puede fallar?.

En la casta religiosa de los adoradores del dios mercado hay hermeneutas que explican la palabra. El gurú corporativo Hammer Capital interpretó una evasiva de Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional, un organismo que asesora al presidente de Estados Unidos en políticas económicas mundiales y nacionales. En una entrevista que le hicieron en la cadena de televisión Fox News sobre si Donald Trump iba a aplicar todos los aranceles con los que amenaza Hassett contestó: "creo que el presidente va a decidir lo que el presidente va a decidir".

Una frase así sólo la pueden decir dos entes increíbles: Mariano Rajoy ("los españoles son muy españoles y mucho españoles") y Yaveh ("Yo soy el que soy"), según dicen que oyó Moisés, escribió alguien y tradujeron Reina y Valera. La evasiva de Hassett empieza con una declaración de fe ("yo creo") y sigue con una obviedad que solo puede contener un enigma o una gilipollez. Como Hassett no es considerado un gilipollas otro que nunca diría de sí "yo soy el gilipollas que soy" (como ser supremo de la gilipollez) lo interpretó como "Trump está considerando una pausa de 90 días en los aranceles para todos los países, excepto China" y lo escribió en mayúsculas en la fiable red social X. El miedo, la bipolaridad, la impulsividad y el seguidismo de la idiotez costaron 2,5 millardos de dólares. Ese dinero gilipollas estaría mejor repartido para que más personas hiciéramos más gilipolleces.

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