Oviedo, Luján PALACIOS

El patronato que gestiona el Hospital del Oriente de Asturias aprobará el próximo lunes 14 la reforma de sus estatutos para convertir en pública la Fundación que gestiona este centro sanitario, según anunció ayer el consejero de Salud y Servicios Sanitarios, Ramón Quirós. En esta reunión el patronato abordará la modificación estatutaria necesaria para disolver la Fundación, hasta ahora de carácter privado, y refundarla con carácter público «dejando antes resuelto el tema más importante, que es la estabilidad laboral de la plantilla». Quirós insistió en que los trabajadores de este centro «no son empleados públicos» y que, por lo tanto, su integración en el Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) «no se puede hacer por decreto, como plantea el PP».

En la sesión plenaria celebrada ayer en la Junta General del Principado resultó aprobada una proposición no de ley, presentada por el grupo parlamentario de IU-BA-Los Verdes y respaldada por el PP, que pedía iniciar el proceso de transformación en Fundación pública del Hospital Grande Covián de Arriondas, como paso previo a la integración definitiva del centro en la red sanitaria pública regional.

La iniciativa, que, según la diputada de IU Noemí Martín, pretende «buscar puntos de encuentro que sirvan para los usuarios del hospital, los trabajadores y los grupos parlamentarios», emplaza además al Gobierno de Vicente Álvarez Areces a negociar un contrato-programa y un plan de inversiones que garanticen la homologación del Grande Covián al resto de hospitales del Sespa de su misma categoría. Por último, la proposición no de ley solicita que los trabajadores de este centro sanitario tengan los mismos derechos que el resto de profesionales de la red pública del Principado, en especial en lo relativo al reconocimiento del tiempo trabajado y desarrollo profesional, algo que en la actualidad no ocurre.

Además, los dos grupos de la oposición regional impidieron ayer con sus votos que prosperara en la Junta General una iniciativa del PSOE que planteaba desarrollar el proceso de adecuación de la estructura corporativa del Hospital de Arriondas, incorporando la nueva Fundación pública resultante al Sespa, mediante un convenio singular que garantizase la estabilidad de la plantilla y adecuando su gestión «a los criterios que se establezcan para el conjunto de la red hospitalaria asturiana».