Colombres, Rebeca AJA

La participación del club Judo Rivalsán en el Campeonato de Asturias alevín, celebrado el pasado sábado en el polideportivo Yago Lamela de Oviedo, ha sido todo un éxito. Cuatro medallas lo acreditan. La judoka Irene Jiménez apunta maneras de campeona de España después de alcanzar la medalla de oro, lo que la convierte en la mejor deportista asturiana en la categoría de menos de 34 kilos femenina. Ella logró el mejor resultado posible para el equipo que entrena Fernando Fernández y lo hizo ganando todos los combates por ippon (antes de agotar el tiempo reglamentado). La calidad de su judo no sólo mereció el oro sino también las felicitaciones del resto de competidores. Fue «un judo de película», según su entrenador.

Otro deportista local hizo gala de una progresión sorprendente en esto del judo. Rik Weber, también en la categoría de menos de 34 kilos pero masculino, participaba en su primer campeonato regional y logró plantarse en la final ganando todos los combates por ippon. No logró sumar la victoria definitiva pero demostró un nivel de competición sensacional que mereció la plata.

Su hermana, Miriam Weber, también se proclamó subcampeona de Asturias en categoría femenina de más de 52 kilos. Ganó sus dos primeros combates por ippon pero la concentración le falló en la gran final y perdió, por la mínima, el título de campeona regional, conformándose con la medalla de plata.

La cuarta medalla cosechada por los jóvenes deportistas del club Rivalsán fue de bronce y la logró Constantino Martín, en menos de 34 kilos. Este judoka comenzó perdiendo su primer combate pero se resarció ganando el resto por ippon y consiguiendo la tercera plaza del pódium final.

Cuatro medallas, una de oro, dos de plata y una de bronce, para el Rivalsán, que presentó al Campeonato de Asturias a los siete deportistas clasificados en la fase zonal celebrada en Langreo: Ancor Pérez (26 kilos masculino), Xabier Blanco (30 kilos), Rik Weber (34 kilos), Constantino Martín (34 kilos), Irene Jiménez (34 kilos), Julia Suárez (42 kilos) y Miriam Weber (más de 52 kilos). Ancor, Xabier y Julia era la primera vez que participaban en un Regional y lo hacían con apenas seis meses de preparación. Se sumaron al club el pasado mes de octubre pero demostraron calidad suficiente para ganarse un sitio en el torneo. El club Rivalsán agrupa a jóvenes judokas de los municipios asturianos de Ribadedeva y Llanes y del cántabro de Val de San Vicente.