Carreña, Rebeca AJA

Cabrales y la localidad francesa de Sadirac celebran, del 25 al 27 de este mes, el acto anual de hermanamiento. No han dejado de hacerlo desde 1994. Por eso, la celebración de este año se convertirá en un homenaje a los principales impulsores de este gesto de convivencia ininterrumpido desde entonces, Francisco «Kiko» y Mari Carmen Prieto, tristemente fallecidos y recientemente nombrados «Citoyen d'honneur» (ciudadano de honor) por su dedicación para mantener en vigor los lazos de amistad entre ambos territorios hermanos.

Manda ese apego que el último fin de semana de abril sea una delegación cabraliega la que visite Sadirac y que las gentes de este pueblo devuelvan la visita en el mes de septiembre, coincidiendo con la fiesta patronal de la Virgen de la Salud. Ahora toca viajar a tierra francesa porque Sadirac está de celebraciones por estas fechas y el programa festivo también incluye la conmemoración de los catorce años de hermanamiento con Cabrales.

Entre los actividades programadas destaca la celebración una misa astur-francesa en la que no faltará la tradicional procesión y subasta del «ramu». Tampoco los romeros ataviados con el traje regional y una representación del grupo folclórico «Corri-corri». Una feria artesanal, comidas populares, deportes y juegos tradicionales, así como diferentes actos de hermanamiento salpicarán un fin de semana en el que también habrá ocasión para visitar la ciudad de Burdeos o el pueblo medieval de Saint-Émilion.

El acto central de hermanamiento tendrá lugar en la jornada del domingo, con la intervención de los alcaldes de ambos municipios, así como de un representante del comité de hermanamiento de cada país. Por parte de Cabrales, participan en estas celebraciones el Ayuntamiento, así como alcaldes de barrio, miembros de «Corri-corri», la Asociación de Pensionistas y Jubilados, el Consejo Regulador del Cabrales, y alumnos y profesores del Colegio Público Las Arenas. En total, casi medio centenar de personas en representación del concejo de Cabrales, alojados gratuitamente por los vecinos del municipio anfitrión. El comité de hermanamiento cabraliego lo encabeza Pepina González, quien mantiene la dedicación que durante años demostró su difunto marido, Francisco Prieto. Fernando Corro y, en la parte escolar, Pelayo Martínez, completan el comité.