Ribadesella, Bárbara MORÁN

Ribadesella tendrá este verano un nuevo reclamo turístico, pionero en la comarca. Se trata de una ruta turística de orientación, un deporte al que cada vez hay más personas «enganchadas». Este es el caso del riosellano Roberto Vicente Blanco, bombero de profesión y un experto en el deporte de la orientación, al que lleva años dedicándose en sus ratos libres. Su destreza en esta disciplina deportiva y la necesidad del sector turístico local de innovar su oferta de forma creativa, sobre todo en tiempos de crisis, han dado como resultado esta iniciativa.

La Asociación Riosellana de Turismo Rural (Aritur), presidida por, Juan Luis Toribio, ha sido la encargada de materializar el proyecto del deportista, quien, a su vez, es socio del colectivo, ya que regenta, junto a su novia, Ana Blanco, una casa de aldea situada en las inmediaciones de Lloviu.

La ruta de orientación cubrirá una distancia de 4 kilómetros, con salida desde el área recreativa de Cuerres; discurrirá por el Camín de la reina hasta los acantilados de Tomasón, se desviará después hacia Toriello por el Camino de Santiago y, desde aquí, continuará por el puente de Guadamía para regresar al punto de partida. «La ruta tiene un trazado sencillo, puede hacerla todo el mundo», destaca Toribio.

El proyecto de la ruta ya está cerrado y su ejecución sólo depende de la obtención de los permisos pertinentes de la Demarcación de Costas y de la Consejería de Medio Ambiente, ya que, para que los turistas puedan realizar esta ruta, es necesario instalar balizas, señales indicativas y mapas en los terrenos, que pertenecen al Dominio Público Marítimo y Terrestre.

La iniciativa se presentó ayer en la casa rural El Rincón del Sella con motivo de la visita de los alumnos de la Escuela de Turismo de Gijón, ya que el negocio de Roberto y Ana es considerado por el profesorado de la Escuela de Turismo como «el mejor ejemplo de que la innovación y la creatividad son las claves para tener éxito en el turismo rural», según destacó Tomás Flores, profesor de la escuela gijonesa y antiguo director general de Turismo del Principado.

El negocio de esta pareja riosellana no conoce problemas tan presentes en el sector como la estabilización de los clientes en verano y en los festivos. Su secreto, trabajar duro para que los clientes se sientan como en casa y ofrecerles hasta diez actividades distintas que pueden realizar sin alejarse de la vega del Sella. Sus programas pueden consultarse en el blog orientysella.