Arriondas / Cangas,

R. DÍAZ / B. MORÁN

La reolución de los crímenes de Collía y Cangas de Onís está resultando mucho más compleja de lo que se esperaba. Tanto que la Delegación del Gobierno en Asturias y la Guardia Civil hicieron ayer un llamamiento a la colaboración ciudadana para esclarecer las muertes de Francisco Javier Vega Cuadriello, acuchillado en febrero en el portal de su casa de Cangas de Onís, y del taxista Guillermo Amieva Gallego, asesinado cerca de Collía (Parres), mientras realizaba un servicio nocturno.

El departamento que encabeza Antonio Trevín destacó la «necesidad» de que los ciudadanos aporten cualquier detalle relacionado con los crímenes, «aunque sea mínimo», para que las investigaciones puedan concluir «de forma positiva». Y subrayó que en este tipo de colaboración «está garantizada la confidencialidad de las personas que ofrece la información». Delegación del Gobierno aseguró que la Guardia Civil trabaja «permanentemente» para esclarecer los crímenes y detener a los autores.

Responsables de Delegación del Gobiern, que ayer se reunieron en Oviedo con los alcaldes de Cangas (Alfredo García) y Parres (Millán García), representantes de los taxistas de ambos concejos y dirigentes de las fuerzas del orden, anunciaron que se perfeccionarán los mecanismos de coordinación entre la Guardia Civil y las Policías locales de Cangas y Parres para garantizar la seguridad de los ciudadanos. El secretario general de la Delegación del Gobierno, José Luis García, indicó que «pese a estos dos hechos desgraciados, los índices de seguridad en estos dos municipios se mantienen en unos niveles altos, dado que se sitúan en una cifras similares a la media asturiana y están muy por debajo» de la española.

Delegación del Gobierno se comprometió con los taxistas cangueses y parragueses a estudiar los lugares más adecuados para la instalación de cámaras de vigilancia en las inmediaciones de las paradas de taxi de la zona.