Ribadesella quita barreras a La Mediana

Nueve son las sugerencias que el Ayuntamiento de Ribadesella ha presentado al proyecto estatal elaborado para recuperar ambientalmente las marismas del río Sella. Las alegaciones municipales abaratarían el coste de la actuación en un millón de los tres millones de euros que se estiman invertir en la ejecución del plan. A través de un escrito, la concejalía de Medio Rural, liderada por Francisco Vázquez, remitió el viernes al Ministerio de Medio Ambiente y a la Dirección General de la Costa y el Mar, todos los aspectos que, a juicio de Vázquez, conocedor de las marismas locales, «no se ajustan al valor de la zona; creemos que el resultado del proyecto sería mucho mejor si se tuviesen en cuenta nuestras sugerencias, que no tienen otro objetivo que el de enriquecer la obra».

El Ayuntamiento de Ribadesella recibió el pasado 15 de abril el documento del Ministerio de Medio Ambiente en el que se anunciaba que, finalmente, el estudio de impacto ambiental del proyecto para recuperar ambientalmente las marismas del Sella o zona de La Mediana se sometía a un proceso de información pública. Un movimiento que sacaba por fin del estancamiento un proyecto, pionero a nivel nacional, que llevaba parado más de tres años.

Una vez revisado el extenso proyecto, desarrollado en unas mil páginas, el área de Medio Ambiente del Consistorio riosellano comenzó a trabajar en las alegaciones. El resultado son nueve sugerencias para subsanar otros tantos «errores» detectados por el equipo de gobierno municipal, que espera lograr como objetivo final «una modificación del proyecto en los puntos que sugerimos, ya que lo único que queremos es lo mejor para estos hábitats de gran valor ecológico y singularidad a nivel mundial», asevera el edil Vázquez.

l Una senda peatonal circular. La primera crítica municipal al proyecto se centra en la inexistencia de una senda peatonal circular que ofrezca al visitante la opción de contemplar toda la extensión de La Mediana por la margen izquierda del río Sella, concretamente por el dique existente. El resto del itinerario debería proyectarse, a ser posible, por los caminos ya existentes.

l Un puente para salvar la zona inundable por la rotura del dique. La segunda sugerencia trata de matizar una actuación sí contemplada en el proyecto. Se trata de la rotura de un dique para facilitar que la zona se inunde de forma natural con las mareas. El proyecto estatal sólo habla de eliminarlo y el Ayuntamiento propone salvar la citada rotura con un puente de madera.

l Eliminación de la pasarela proyectada dentro de La Mediana. El aspecto que más discordia ha provocado es la proyección de una pasarela de madera que discurriría por el medio de la zona inundada de agua para que los visitantes puedan contemplar la zona, su fauna y flora. Vázquez fue muy crítico con este aspecto y recordó que si el objetivo de la iniciativa es devolver a un hábitat su aspecto natural y retirar los rellenos que se hicieron «esta pasarela supondría un gran impacto y eso es algo incongruente dada la esencia de la iniciativa. Además, conllevaría un impacto sobre la avifauna que utilizase el lugar como zona de descanso y alimentación y perturbaría gravemente las posibilidades de nidificación de especies anátidas y limícolas», se queja Vázquez.

l No al nuevo dique en la zona sur. La cuarta alegación del Ayuntamiento de Ribadesella se refiere al dique propuesto en la zona sur, algo sobre lo que el gobierno local no ve negociación posible. «Su construcción no está justificada y además supone un millón de euros de inversión. Si fuese necesario, bien, pero no lo es», explica Vázquez, que asegura que el volumen de esta infraestructura provocaría «un gran impacto y además la zona que se pretende proteger de las inundaciones puede perfectamente incluirse en el proyecto». El proyecto estatal destina a este dique un millón de los tres previstos para el total de la actuación.

l Creación de un pequeño azud. La rotura prevista del dique existente deberá hacerse con un pequeño azud o presa, según el Ayuntamiento, que opina que una zona como La Mediana debe mantenerse con agua de forma permanente. «El dique debe romperse un poco para que salga todo el agua», puntualiza el edil encargado del área de medio ambiente.

l Una charca para los anfibios. La creación en la zona de alguna charca de agua dulce para favorecer las poblaciones de anfibios es la sexta propuesta de los gobernantes riosellanos.

l Mejoras en el futuro centro de interpretación. Las tres siguientes críticas a la iniciativa se centran en el centro de interpretación proyectado para la zona, que para el Ayuntamiento debe contar con una torre de observación de aves en la cubierta, ya que el lugar en el que se levantará carece de una elevación adecuada. Realizar pequeños islotes con la tierra sobrante que se retire de las zonas que fueron rellenadas y retirar las torretas de alta tensión que aún quedan en la zona concluyen el escrito de sugerencias.

«Todas ellas se presentan con el afán de mejorar este proyecto y de lograr que esté a la altura del valor ecológico y medioambiental de la zona. No viene al caso una especie de parque de atracciones, sólo se trata de recuperar una zona de alto valor natural que fue alterada gravemente», apunta Vázquez.

Aparte de las matizaciones introducidas por escrito, el proyecto es valorado, en líneas generales, de forma «muy positiva» por la concejalía de Medio Ambiente, aunque con cierta prudencia. «Sólo espero que no ocurra como en el Malecón, donde se proyectaron unas obras a las que se fueron haciendo recortes para que lo hecho se pareciese poco a lo ideado inicialmente», advierte Vázquez, que concluye manifestando su esperanza de que «se tengan en cuenta nuestras sugerencias, que además de mejorar el proyecto lo abaratan en un millón de euros, algo importante en tiempos de recortes».

El proyecto de recuperación ambiental de las marismas del Sella pretende devolver a la zona el agua retirando los rellenos y dejando que la marea inunde el área. Además, se edificará un centro de interpretación. El Instituto de Recursos Naturales y Ordenación del Territorio (Indurot) advierte de que no existen ejemplos de restauración marismal en Asturias y hay apenas unos pocos casos en España, por lo que esta actuación requerirá un seguimiento muy exhaustivo. La superficie de las marismas riosellanas, Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), Red Natura 2000 y Lugar de Interés Comunitario (LIC) alcanza los 532.651 metros cuadrados.