La situación laboral de los trabajadores del Hospital Comarcal del Oriente Francisco Grande Covián provocó una refriega entre el PSOE y el PP en la Junta General del Principado. Los conservadores, por boca de la diputada regional Victoria Delgado, acusaron a las autoridades sanitarias de discriminar a la plantilla del Hospital de Arriondas, a lo que el consejero del ramo, Faustino Blanco, replicó que la actuación de su departamento responde únicamente al "estricto cumplimiento de la legalidad".

Las hostilidades entre socialistas y populares se desataron el lunes por la tarde, durante una comparecencia de Faustino Blanco en la Junta General del Principado. Victoria Delgado había presentado una pregunta para conocer la situación laboral de los empleados del Grande Covián. La respuesta de Blanco fue concisa y escueta: "Los empleados del Hospital del Oriente son indefinidos con destino fijo".

Delgado destacó a continuación la "inquietud" que sienten los empleados del centro asistencial de Arriondas al verse obligados continuamente a recurrir a la "vía judicial para defender sus derechos". La parlamentaria del PP puso como ejemplo que los galenos del Grande Covián se han visto obligados a recurrir a los tribunales para que se les reconozcan los servicios prestados como médicos residentes, para que les computen en el apartado de antigüedad. Delgado puso otro ejemplo: a los empleados del Hospital de Arriondas no se les abonan directamente los trienios como al resto de empleados de los hospitales públicos, por lo que se ven obligados a solicitarlos ante los tribunales de justicia.

"A los trabajadores del Hospital de Arriondas se les está dando un trato discriminatorio", subrayó Delgado, "pues al resto de los empleados sanitarios se les abonan los trienios de oficio". La parlamentaria calificó de "anormales" los tratos hacia la plantilla de Arriondas, habló de "disfunciones" y "quebrantos", y denunció una supuesta "discriminación" respecto al resto del personal hospitalario de Asturias.

El consejero de Sanidad rechazó las acusaciones. Lo negó todo. "Las cosas son como son, no se puede forzar la legalidad", señaló, a la vez que subrayó que a los empleados del Hospital de Arriondas se les aplica el convenio de subrogación aprobado el 23 de febrero de 2012.

"Son indefinidos con destino fijo a los solos efectos de cumplir" la ley de integración", señaló el Consejero, quien rechazó que la situación laboral de los empleados de Arriondas sea equiparable al resto de los trabajadores hospitalarios. "No pueden ser personal laboral fijo porque no superaron ningún proceso de selección para ocupar una plaza pública", destacó Blanco. "La legalidad es terca, no actuamos por capricho, ni con intención de perjudicar a nadie, sino en cumplimiento de la legalidad", añadió.