Los comerciantes y hosteleros temen que su imagen quede dañada a causa del argayón de Parres que corta la N-634. Los empresarios argumentan que el caos circulatorio que impera en los desvíos, especialmente en el de Llames de Parres, hará que muchos visitantes se lo piensen dos veces antes de volver a visitar la comarca y piden que con vistas ala Semana Santa se habilite un paso alternativo regulado por semáforos. Es el caso de José Manuel Narciandi, que regenta en Cangas el restaurante Rocamar. "Van a venir igual porque ya tienen el viaje planeado pero sufrirán retenciones de tráfico que harán que se lleven mala imagen de la zona", explica el hostelero, que recuerda que el turismo es el principal motor económico.
"Que el carril alternativo funcione es fundamental porque en el día de mercáu ya se nota algo de bajón y Semana Santa es un termómetro de cómo se va a presentar el verano", explica Fernando Aranguez, que regenta en Cangas el hotel Plaza. En la misma línea se expresa Elías González, que desde hace dos décadas está al frente de La Barata, una tienda canguesa de productos típicos asturianos. "Hay mucha incertidumbre. Esperemos que trabajen en el argayón a marchas forzadas -ayer se ampliaron trabajos al turno nocturno- para abrir un paso pues los desvíos de Llames de Parres y Cuadroveña no tienen capacidad para absorber tanto tráfico y puede haber incluso algún accidente porque son vías muy estrechas", reflexiona. "Gente que se hospede por ejemplo en Infiesto igual tiene planeado pasar dos días de visita por Cangas y si el primero ve que hay atascos y retrasos pues el segundo ya no vuelve", apunta.
Más optimista se muestra Luis González, que está al frente del Sella Hotel, junto al puente "romano" cangués. "El setenta por ciento de los turistas entran por Llanes, así que no les afecta el corte. Aquí viene gente de fuera, principalmente del País Vasco. Claro que me gustaría que restableciera el tráfico lo antes posible pero factores como la lluvia me preocupan mucho más", afirma.
Para Iván Fernández, que regenta en Arriondas la tienda de souvenirs Área Sellasturez, el argayón si supone un problema ya que la mayoría de sus clientes son excursionistas que vienen en autobuses grandes y su paso por los desvíos actualmente está prohibido. "Ojalá me equivoque pero va a haber problemas y es mejor que abran un paso alternativo", cuenta. "Para coger la autovía a Ribadesella pierden treinta minutos y ahora que empieza la temporada no se puede estar así", dice.
Antonio Carmona y Víctor González, de la empresa de turismo activo Aventura Norte lamenta que no se tomaran medidas antes en la zona del argayón porque "hace veinticinco años que se sabe que va a ocurrir una desgracia" y confía en que se arregle pronto. "Los turistas de fuera vendrán porque no saben nada y se encontrarán el problema de frente. Los de otros concejos evitarán venir aquí y optarán por otras opciones para el turismo activo como ir a la ría de Navia", lamenta.
