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En Caravia la política queda en familia

Cuatro de los siete puestos de la lista de IU son familiares a los que "Cifra", único edil que tuvo la formación, legó su pasión

Por la izquierda, Elsa Valle, Paz Sánchez, César Luis Valle y Gema Sánchez. P. M.

Desde que Paz Sánchez y su hermana Gema tuvieron unos quince años, la política fue un tema frecuente en su casa, que también era la de Ramón Sánchez, más conocido como "Cifra". Él fue el único concejal que ha tenido Izquierda Unida en la Corporación local y buena parte de su familia tratará que la formación recupere esa representación en los próximos comicios.

Ambas hermanas y el marido y la hija de una de ellas ocupan cuatro de los siete puestos que tiene la lista electoral en el concejo, un reparto que achacan "a la necesidad", pues "sería mucho mejor que hubiera participación de más gente", explica Gema Sánchez. Ella va en el número cinco de una lista que su hermana, Paz Sánchez, lidera. En el sexto puesto va César Luis Valle, marido de la aspirante a la Alcaldía, y cerrando la lista la hija de ambos, Elsa Valle Sánchez, que además es la número dos en la lista autonómica por la circunscripción del Oriente con IU.

Aseguran que es "muy difícil hacer una asamblea y una candidatura de izquierdas en un concejo tan conservador como Caravia" y por eso han tirado de los integrantes de la formación local para los tres últimos puestos de la lista. Fueron las dos hermanas quienes, en el año 2012, pusieron en marcha la asamblea de IU en Caravia, por la "necesidad" que vieron en el concejo y "como homenaje" a su padre, "por supuesto", añaden casi al unísono.

"Cifra" nunca llegó a saber que sus descendientes continuarían su labor, pues las conversaciones sobre política eran frecuentes pero "no adoctrinó", apunta Elsa Valle, quien a pesar de su juventud llegó a conocer esta faceta de su abuelo. El que fuera concejal del Ayuntamiento de Caravia durante varios mandatos en los años ochenta inculcó en sus hijas "los valores , la lección de vida y la manera de comportarse", describe su nieta. Con la mirada puesta en el futuro inmediato, la familia está segura de que "Caravia necesita oposición, trabajo y alguien que piense en la gente todos los días que no sean electorales", asegura Paz Sánchez, antes de reparar en que "hay muchos bancos, pero no gente para sentarse en ellos". En las últimas elecciones se quedaron a tan sólo dos votos de sacar un concejal y confían en que los vecinos los sigan apoyando para lograrlo el próximo 24 de mayo. "Hace falta trabajo en Caravia y dentro de la Corporación, gente que aporte otras ideas y que los vecinos se implique en la vida municipal", añade la candidata.

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