Se cumplen dos meses desde que fuera devuelta a su proveedor la pantalla luminosa de la plaza Camila Beceña, en Cangas de Onís, porque no tenía un correcto funcionamiento. A día de hoy, casi nadie se da cuenta de que falta la pantallita; algo parecido a lo que acontece con los semáforos de la ciudad, que suman años sin que los pongan a funcionar. Hay gente que augura que con la pantalla pasará como con el proyecto de fuente en esa plaza, antes llamada del Ayuntamiento, ideada por un gobierno del PP y desechada por otro del PSOE. ¿Harán lo mismo con la pantalla si el PP de Pepín no consigue gobernar tras el 24-M? "Cuanto más vivas, más verás", dice a menudo "El Superpoli".