No son buenos tiempos para el PSOE y el PP en Llanes. En las elecciones municipales del pasado domingo, socialistas y conservadores certificaron su peor resultado en 36 años. Sólo en los primeros comicios de la democracia, en 1979, PSOE y PP (entonces bajo el nombre de Coalición Democrática), obtuvieron menos votos que el pasado fin de semana. El urbanismo en el caso de los socialistas y la división interna en el de los populares aparecen como las principales causas, aunque no las únicas, de la debacle.

Pese a haber sido el partido más votado, con casi el doble de los votos que la segunda formación, el PSOE es el gran perdedor de las elecciones, tras conseguir únicamente 2.959 votos y perder dos concejales y la mayoría absoluta que tenía desde hacía 28 años. Fueron 837 votos menos que hace cuatro años, y 1.668 menos que en 2007, cuando alcanzaron su techo electoral, con 4.627 sufragios. Sólo en 1979 sumó el PSOE menos votos que el domingo, 2.685, en un tiempo en que el partido dominante era la Unión de Centro Democrático de Adolfo Suárez.

¿Razones de esa enorme pérdida de votos en los dos últimos mandatos? El exalcalde y militante socialista Manuel Miguel Amieva apuntó varias. Primera, que concurrieron a las elecciones cinco candidaturas, "con candidatos muy presentables, así que había opción a votarles", con lo que el abanico de posibilidades se abrió como nunca antes en Llanes. Segunda, los errores en los tiempos de tramitación del Plan General de Ordenación de Llanes (PGOLL), que el PSOE quiso aprobar en febrero y sacar a información pública dos meses antes de las elecciones. "Fue el peor momento posible y eso perjudicó gravemente al PSOE", sentenció Manuel Miguel Amieva, quien añadió, además, el mensaje equivocado de los socialistas al subrayar al principio de la exposición pública que se habían presentado muy pocas alegaciones, apenas una docena. Al final fueron más de 1.800, "una avalancha", que unida a la "insurrección popular" condenó definitivamente al PGOLL y al PSOE.

Otra razón del fracaso socialista fue, según Manuel Miguel Amieva, que se palpaban en el concejo "ganas de cambio", circunstancia que desembocó en que más de una veintena de pueblos "se levantaran en armas". Y no sólo contra el PGOLL, "también contra los elevados impuestos, sobre todo el IBI. Si, además de todo ello, en la campaña no se llegó a la gente y no se le dio respuesta satisfactoria sobre el futuro del PGOLL, el resultado estaba cantado", añadió.

Manuel Miguel Amieva, que antes de acceder a la Alcaldía fue concejal de Urbanismo, resaltó que la actual situación del sector inmobiliario, "por los suelos", llevó a muchos vecinos a concluir que "no es tiempo de recalificaciones, al menos, hasta que todo esto se aclare, y menos aún con tres planeamientos anulados y el actual defenestrado", añadió.

Aún ve una razón más el exalcalde llanisco para explicar la derrota socialista, al no haber conseguido mantener la mayoría absoluta: "quizá hubo también algunos votos que se escaparon por la pequeña ruptura interna", escenificada cuando la todavía alcaldesa en funciones, Dolores Álvarez Campillo, decidió disputar la secretaría general de la Agrupación Socialista de Llanes al anterior mandatario, José Balmori. La regidora ganó aquel pulso, pero perdió importantes apoyos dentro de su partido.

Pese a todo, el PSOE ha sido el partido más votado en todas las mesas electorales de Llanes, salvo en la de Poo, donde VecinosXLlanes lo derrotó por un voto. Eso sí, los socialistas sólo consiguieron superar el 50 por ciento de los votos en dos mesas, las de Nueva y Pría, mientras que hace sólo unos años ganaban con holgadas smayoría absolutas en casi todos los pueblos.

Cuarta fuerza local

El PP también ha salido malparado de las elecciones del domingo. Sumó 1.148 votos, 414 menos que hace cuatro años y 2.224 menos que en 2007 y se quedó, con sólo dos concejales, como cuarta fuerza local, tras el PSOE, Foro y VecinosXLlanes. La derecha llanisca, que gobernó durante los dos primeros mandatos de la democracia, sólo había obtenido menos votos en el concejo en 1979, cuando, como Coalición Democrática, sumó 1.100 votos, sólo 48 menos que el domingo pasado.

En el caso del PP las razones del bajón parecen claras: "el parto de los montes", que es como Manuel Miguel Amieva ha bautizado con ironía la decisión del partido de designar como candidato a Juan Carlos Armas, ex de Foro, ex del PP y actual concejal no adscrito, frente a la decisión del partido e Llanes de que fuera candidato su hasta hace unos días presidente, Juan Duyos. Un Juan Duyos que abandonó el PP unos días antes de las elecciones dando un portazo, acusando a los dirigentes regionales de haber "marginado y ninguneado" a la junta local y de haber entregado el partido en Llanes a quienes, en su día, "intentaron destruirlo". Esa "división interna muy fuerte" condicionó, según Miguel Amieva, el resultado del PP.