La ausencia de junta local, tras la dimisión en bloque de la anterior días antes de las elecciones, obligó al PP de Llanes a organizar una suerte de asamblea (restringida, eso sí) de militantes y simpatizantes en la noche del pasado miércoles, para debatir el futuro de la negociación por la alcaldía. En la sede del PP llanisco se juntaron el secretario general del partido en Asturias, Fernando Goñi; los dos futuros diputados por el Oriente, Luis Venta y María Fe Gómez; el coordinador del partido en la comarca, José Manuel Fernández; los dos futuros concejales locales, Juan Carlos Armas y Ana María Gutiérrez; el exparlamentario de Foro y expresidente del PP local Fidel Sánchez y más de una veintena de afiliados y simpatizantes; entre ellos, los apoderados que representaron al PP en las elecciones municipales.

Porque no todos los presentes están afiliados al PP. De hecho, ni Fidel Sánchez ni Ana María Gutiérrez lo están aún. Esta firmó su ficha de afiliación, junto con otros integrantes de la lista, el 24 de mayo, y su solicitud aún no ha superado todos los trámites que exigen los estatutos del partido.

En la reunión quedaron claras varias cosas. Primera, que el objetivo principal es arrebatar la alcaldía al PSOE, aunque, como apuntó Goñi, la negociación debe estirarse "hasta el último minuto" para buscar las mejores condiciones posibles para el partido. Segunda, que una pequeña parte de la militancia quiere un alcalde del PP o, en su defecto, que el PSOE gobierne en minoría, para así no tener que apoyar ni a Foro ni a la agrupación de electores VecinosxLlanes. Tercera, que ante la disyuntiva de tener que elegir entre apoyar a la forista Marián García o a Enrique Riestra, de VecinosxLlanes, la mayoría prefiere a la primera. Y cuarta, que nada de lo hablado debía trascender ni a la prensa ni a los vecinos, supuestamente, para evitar que se desbaraten las negociaciones con el resto de la oposición.