Ocho días ha durado la cadena que impedía el paso de vehículos a los bufones de Llames de Pría. En la mañana de ayer, el cierre apareció roto. Llueve sobre mojado: tanto la cadena como los señales de tráfico de prohibido el paso a vehículos no agrícolas que se han colocado en los últimos años en la zona han sido literalmente arrancadas y destruidas. El Ayuntamiento de Llanes anunció que colocará hoy una nueva cadena, que llegará en esta ocasión acompañada por señales de prohibido el paso y un cartel que indica la ausencia de aparcamiento junto a los bufones, según adelantó ayer el concejal de Playas, Javier Ardines, de IU.

El rechazo de algunos vecinos al cierre del camino por el que se accede a los bufones de Pría podría estar detrás de la rotura de la cadena, pues la Policía Local recibió en la mañana de ayer una llamada en la que un lugareños denunciaba que no podía llegar con su tractor hasta unas parcelas en las que tenía ganado al que tenía que tenía que atender. Poco después la cadena aparecía rota.

Javier Ardines aseguró que sólo tres ganaderos poseen o llevan fincas y tienen ganado más allá de la cadena, y, por lo tanto, tienen derecho a retirar la cadena para pasar con sus vehículos. Señaló que hace unos días intentó entregar llaves del cierre a los tres, pero sólo uno la recogió. Hay asimismo una llave en el bar La Pumarada para uso general, "por ejemplo, si tiene que entrar la Guardia Civil, una ambulancia o los bomberos", señaló Ardines. Hoy será la Policía Local la que entregue personalmente las llaves a los dos ganaderos con derecho a circular por la vía que aún no las han recogido.

Además, los agentes investigarán lo ocurrido con la cadena, pues se ha registrado un caso de destrucción de propiedad pública en una vía municipal. Ardines adelantó, asimismo, que mañana podría estar ya lista una zona de aparcamiento, en una finca situada a la entrada de Llames desde Garaña, a la que se intentará derivar los coches, hasta que esté llena. Con vistas al futuro la idea es habilitar como estacionamiento un terreno comunal situado a unos 800 metros de los bufones, con mucha mayor capacidad que la finca que ahora se prepara para tal fin. Se trata del terreno propuesto hace ya unos años por la Asociación de Vecinos de Llames de Pría dentro de un ambicioso plan de reordenación del tráfico en la zona, con el objetivo de impedir que el paso incontrolado de vehículos hasta el campo de bufones siga degradando la zona (la vegetación prácticamente ha desaparecido, la mayor parte de los bufones o están cegados, obstruidos o tienen restos de piedras y otros materiales y basura en su interior y el anterior equipo de gobierno construyó un parking ilegal al pie mismo de los bufones).

Ardines subrayó que el cierre del acceso a los bufones, la colocación del cierre y la eliminación del aparcamiento ilegal no es "un capricho" del equipo de gobierno, sino "una orden del Gobierno del Principado" que persigue "la conservación de los bufones" y su entorno, declarados zona de especial protección, y que las autoridades municipales están obligados a cumplir.

Ordenación en Gulpiyuri

El concejal de Playas anunció asimismo la inminente reordenación del tráfico en el entorno de la playa de Gulpiyuri, en Naves, visitada diariamente por cientos de personas en verano. El Ayuntamiento ha iniciado la reparación del vial de tierra que une el nudo de enlace de la autovía con la carretera de Villahormes a Hontoria, con la idea de convertirla en unidireccional. Así, los vehículos que entren desde el nudo de la autovía tendrán que salir obligatoriamente por Villahormes.

Ardines intentaba asimismo pactar ayer un acuerdo con la propietaria de una finca situada en el entorno de Gulpiyuri, con la idea de habilitarla como aparcamiento, si no está afectada por la Ley de Costas y lo permite la legislación autonómica.