Desalojar del matadero comarcal de Margolles al "okupa" que lo gestiona es el único objetivo de la mancomunidad de concejos del oriente de Asturias, que se constituyó ayer en su sede, en Cangas de Onís, con los representantes salidos de las elecciones de mayo. El nuevo gobierno comarcal solicitará en las próximas horas ayuda a la Delegación del Gobierno para desalojar la instalación, tras fracasar todos los intentos anteriores, incluido el último, en abril, respaldado por una autorización judicial.

El nuevo gobierno comarcal surgió del consenso de todos los grupos políticos: PSOE, PP, Foro y Vecinos x Llanes, en un pleno de guante blanco en el que todo lo tratado salió adelante por unanimidad. El alcalde de Parres, Emilio Longo (PSOE), es el nuevo presidente comarcal. Estarán en la Junta de Gobierno, ocupando las tres vicepresidencias y en ese orden: el alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González (PP); la regidora de Peñamellera Alta, Rosa Domínguez de Posada (Foro); y el alcalde llanisco, Enrique Riestra (Vecinos x Llanes). Será tesorero el alcalde de Piloña, el socialista Iván Allende.

El asunto de mayor calado abordado ayer fue el futuro del matadero comarcal, enmarañado desde hace cinco años en una auténtica "guerra" judicial entre la mancomunidad y el gestor de la instalación. Pese a que las últimas sentencias han dado la razón al ente comarcal, y a que un juez autorizó hace unos meses el desalojo del edificio, los dirigentes de la mancomunidad han sido incapaces de echar al empresario que gestiona el centro desde 2004, Julio Enrique Díaz Prado, al que los dirigentes comarcales han calificado de "okupa" en diferentes ocasiones en los últimos meses. El empresario ha manifestado su disposición a entregar las llaves del edificio "si sigue la actividad y la actual plantilla", pero "no a la mancomunidad", al considerar que este está "disuelta", como recoge una sentencia judicial, que añade que la gestión de la instalación corresponde al Principado.

Mientras tanto, el matadero, cuya continuidad exigen los ganaderos y los carniceros de la comarca, sigue funcionando "con absoluta normalidad", según manifestó ayer un responsable del centro. El macelo sacrifica entre 150 y 200 reses de vacuno y de 600 a 800 corderos al mes.

La mancomunidad acordó asimismo solicitar al Gobierno del Principado un secretario o secretaria provisional, dado que la que ocupa en la actualidad ese cargo se jubila este mes.