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El consultorio oriental

Los mosquitos son para el verano

Las picaduras de estos insectos, aunque pueden complicarse, no son graves como las de avispas y abejas en casos de alergia

El verano es la época más propicia para sufrir los incómodos ataques de algunos bichos, principalmente mosquitos, abejas, avispas, arañas o serpientes. Como no siempre se pueden evitar que picaduras, lo mejor es tomar buena nota de los consejos que dan expertos como el alergólogo Gaspar Gala.

Asegura que lo fundamental es diferenciar entre una alergia, que a veces llega a ser grave, de una reacción local. Ésta puede complicarse, generar cierta alarma y confundirse con la primera, pero no es grave como sí pueden llegar a ser los pinchazos de los himenópteros (abejas y avispas) que en ocasiones son hasta mortales si provocan un shock anafiláctico en casos de alergia. Se trata de una reacción sistémica global, no sólo en la zona del pinchazo, y provoca disnea, hipotensión y hasta un fallecimiento fulminante. De hecho, todos los veranos se conoce algún fallecimiento por ataques de abejas o avispas en personas que son alérgicas. Les causan problemas respiratorios, cardíacos y digestivos graves. "Sólo lo provocan estos insectos si eres alérgico", insiste Gaspar Gala. Pues son los bichos más peligrosos en el caso de que desencadenen una reacción de este tipo. La ventaja es que se puede realizar un tratamiento preventivo con resultados muy positivos en los pacientes.

El resto de las picaduras, como las de los temidos mosquitos, más por las molestias que generan que por la gravedad de sus ataques, producen "reacciones locales", destaca Gala. Aunque a veces puede complicarse el picotazo. También ocurre en ocasiones que no se sabe qué insecto es el que ha atacado.

El tratamiento es sencillo. Lo primero es aplicar hielo, por sus efectos vasoconstrictores, en la zona para evitar la inflación. También se suele recurrir a un antihistamínico y a una crema corticoide. Si ésta no es suficiente habrá que tomar corticoides orales. En el caso de que se infecte la picadura, la mayoría de las veces por las por las bacterias de la propia piel o de las uñas al rascarse, debe recetarse un antibiótico. La evolución varía entre horas y días. Pero "no es una reacción alérgica, es una reacción local exagerada", insiste el alergólogo. Hay personas que sufren más que otras los ataques de los mosquitos y también tienen una predisposición a reaccionar de forma intensa, apunta Gaspar Gala. El olor es un atractivo para ellos, que se mueve por aromas y colores. De ahí que haya quien suela ser casi siempre diana de los ataques de estos bichos, más activos en verano. El sudor o determinados perfiles de la sangre también son un atrayente para estos animales. Así que lo recomendable es "ser discretos". Es decir, evitar llamativos olores en perfumes y colonias y colores en el vestir, así como el uso de repelentes, aunque no siempre funcionan. "No hay tratamiento para evitar las inflamaciones fuertes y a veces un solo mosquito provoca la inflación de la cara o un brazo entero", explica el alergólogo.

Las arañas también hacen de las suyas en verano y las hay más y menos tóxicas, pero tampoco generan una reacción alérgica por lo que "no son graves ni corre riesgo la vida". También es importante aplicar hielo para evitar el hinchazón.

Con las serpientes hay que tener más cuidado porque, por ejemplo, las víboras son "muy tóxicas", advierte Gala. Así que en el caso de ataque de una de éstas hay que acudir cuanto antes a las urgencias del hospital, al igual que si se produce una reacción sistémica. Las de las víboras y los escorpiones "son las picaduras más peligrosas en nuestro ambiente"

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