A Venancio Díaz Muñiz, "don Venancio", le gustaban los plumeros de la Pampa, una especie botánica propia de Sudamérica que hoy es considerada en Asturias una especie invasora y cuya erradicación persigue el Gobierno del Principado. A su regreso a Ponga, en el año 1898, el indiano se trajo consigo un buen número de plumeros, considerados entonces simples plantas ornamentales. En Beleño tenía dos huertas, una estaba llena de flores; la otra, de plumeros de la Pampa.

También tenía don Venancio plumeros junto a una casa que construyó en esa misma localidad, aunque en San Xuan de Beleño ya no hay ni un ejemplar y de la presencia de esa especie únicamente queda un "tucu", precisamente en una parcela que fue propiedad de don Venancio. Sí queda algún ejemplar en otras localidades del concejo, varios de ellos plantados incluso en tiestos por algunos vecinos.

En su día, los plumeros de la Pampa fueron plantas muy apreciadas en Ponga, según algunos vecinos, por imitación o influencia de los indianos. De hecho, los alrededores de la iglesia parroquial estaban llenos de ejemplares de esa especie, con la que solían jugar a menudo los que hacían las veces de monaguillos y, en ocasiones, otros niños del pueblo. Así pues, la presencia de plumeros de la Pampa en el concejo de Ponga viene de lejos, de hace 118 años, exactamente.