Llanes se llenó hoy de gente para coronar la Virgen de Guía. Lo hizo el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, en la basílica. La villa en general, y los integrantes del bando de la Guía en particular, con el patronato de la capilla de la Virgen y la comisión de festejos al frente, vivieron con intensidad una fecha que pasará a la historia por la importancia de la ceremonia y su significado.

Las diez parejas de niños de la danza de arcos fueron unos de los protagonistas de la inolvidable jornada en la que los llaniscos se echaron a la calle para arropar la imagen.

El programa de la coronación dio comienzo esta mañana con algo de retraso sobre el horario previsto. La jornada comenzó con una salva de cohetes a la que le siguió un pasacalles donde la banda de Música de Pola de Laviana recorrió las principales calle de la villa. Finalizada la Eucaristía tuvo lugar la procesión de regreso a la capilla. Tras cruzar el puente, la procesión recorrió la plaza de Las Barqueras en dirección a San Antón, donde la Guía miró al mar y se llevó a cabo una oración. La procesión siguió por el barrio Bustillo. Una vez en la capilla se interpretó la danza de arcos y se despidió a la Virgen con el canto de la Salve popular.