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Ribadesella subasta en un solo día noventa kilos de angula, que resiste a 400 euros

La "oscurada" (ausencia de luz lunar) aumenta las capturas y los pescadores celebran un precio "pistonudo" para estas fechas

Varios anguleros, ayer, en la rula de Ribadesella, mientras José Ramón Pintado prepara sus capturas. P. M.

La angula dio ayer más de una alegría en la rula de Ribadesella, donde se subastaron alrededor de 90 kilos, a 400 euros cada uno. Esta cantidad es la más elevada que se ha vendido en un sólo día desde que empezó la costera el 1 de noviembre y cierra un mes marcado por la desigualdad, pues a mediados la rula estuvo una semana sin subastas por la escasez de angula.

La "oscurada" -ausencia de luz lunar-, que el martes vivió su momento álgido con la Luna Nueva, está influyendo para que la angula se anime a remontar los ríos. Así lo creen los pescadores, que empezaron a notar el aumento en las capturas "cuando cambió la Luna, para amanecer el martes". Ya en esa subasta casi se alcanzaron los setenta y ayer era la una de la tarde y los anguleros continuaban llegando con mercancía. El resultado, alrededor de 90 kilos que sin embargo se vendieron a un precio "bueno no, pistonudo", calificó el angulero riosellano Marcos Martino, antes de desear "que aguante así". Los pescadores están esperanzados con que no caiga el precio y hasta ahora han tenido suerte, ya que José Ramón Pintado, trabajador de la rula y también angulero, aseguró que ningún día se vendió por debajo de los 400 euros el kilo. Han fallado, eso sí, las capturas, pues las semanas pasadas hubo muchos días de cuatro, seis y diez kilos y también, coincidiendo con la "súperluna", jornadas sin venta pública porque los profesionales pescaban por docenas. Pero ninguno como ayer, con las cajas apiladas y los trabajadores de la rula tan atareados con la que llaman "tabla de salvación" del sector en Ribadesella, pues ayuda a sobrellevar el invierno y supone su mayor fuente de ingresos.

Al cierre de la campaña de 2014 esta especie supuso el 89,45 por ciento del total ingresado en la lonja, con 123.952 euros. Esta cantidad fue el doble que el año anterior, cuando la angula sumó en la rula riosellana 60.469 euros. Estas cantidades se fraguan a base de muchos kilos, pues sólo los primeros de la costera se pagan a los precios astronómicos que reportan tanta publicidad a quien los compra. El primer lote de este año se lo llevó el restaurante Casa Tista de Toriellu, por 5.500 euros. El cuarto lote ya bajó aquel primer día hasta los 600 euros y el preciado manjar se ha mantenido buena parte del mes alrededor de los 500 euros.

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