Ventanas selladas con cinta adhesiva para evitar el frío, ausencia de agua caliente y falta de educadoras. Son algunas de las deficiencias y carencias de la escuela para bebés y niños de hasta tres años de Posada de Llanes. El centro está abandonado a su suerte por la Administración, según buena parte de los padres de alumnos. Para hacer patente su malestar y exigir una solución, una docena de progenitores se concentraron ayer junto al edificio. La situación, afirman, es insostenible, pues a las carencias materiales y a las deficiencias del edificio se une el escaso número de educadoras, dos menos que el año pasado. Madres y padres exigen huir del "politiqueo" y buscar soluciones. Fuentes municipales subrayaron que hasta ahora no habían tenido constancia de las supuestas deficiencias.

"Hartos", aseguran que se sienten las madres y padres de los bebés. "Realmente no miran por esta escuela, señaló Naiara Gutiérrez, portavoz de los progenitores, quien añadió que los responsables políticos no invierten en mantenimiento del centro. Un ejemplo: en la escuela no hay agua caliente desde el pasado mes de octubre. Las madres aseguran que esta situación se denunció ante las autoridades municipales (el Ayuntamiento es responsable de la gestión del centro) hace ya más de dos meses. Pero no se le ha puesto solución.

Según las madres de la escuela para pequeños de hasta 3 años de Posada de Llanes, el Ayuntamiento sabe que la caldera del centro funciona mal "desde octubre o noviembre", pero ni siquiera se ha buscado "un plan B". Más deficiencias: hay dos educadoras menos que el año pasado. Ello "a pesar de que el Principado prometió que no habría recortes", resaltó Naiara Gutiérrez, quien subrayó que lo ideal es que el centro contara con cinco educadoras, más la directora; pero en la actualidad cuenta con tres educadoras y la directora. Esto supone que a la hora del recreo solo pueden atender a los niños dos educadoras, pues la tercera debe encargarse de los bebés.

La situación se complica si se tiene en cuenta que el patio del centro, situado muy por encima del nivel del suelo, requiere una atención constante por parte de las educadoras durante los recreos. Los padres manifestaron su total apoyo a las educadoras y admitieron que fueron ellos los que recurrieron a la oposición municipal (PSOE) para hacer públicas sus quejas, ante la pasividad del equipo de gobierno. "Pero el verdadero problema no son las cuestiones políticas, no es el 'politiqueo', sino que no hay agua caliente y que faltan educadoras", señaló Gutiérrez.

No son las únicas deficiencias: algunas ventanas del centro están selladas con celo "porque entra corriente", resaltó Naiara Gutiérrez, quien indicó que las madres consideran que el centro está "desatendido".

Las denuncias de las madres y padres coinciden con las que lanzó hace unos días el Grupo Municipal Socialista de Llanes. Según los socialistas, el pasado día 13 se fue una de las educadoras, "después de haberlo comunicado a la concejala de Educación (Marisa Elviro) con antelación suficiente. Pese a ello aún no ha sido sustituida, "con el consiguiente perjuicio en el desarrollo y calidad del servicio a los menores", según los socialistas. El PSOE añadía a la lista de deficiencias la "falta de material docente" y la "ausencia de renovación del mobiliario general y específico" para este tipo de escuelas.

La escuela para bebés y niños de hasta tres años de Posada de Llanes tiene en la actualidad 30 alumnos matriculados, aunque según Naiara Gutiérrez en breve llegarán más bebés, con lo que se agravará aún más el problema generado por el escaso número de educadoras. El centro escolar tiene capacidad para un máximo de 38 pequeños.