El alcalde de Llanes anunció ayer la creación de una comisión de investigación para aclarar la "guerra interna" abierta en el seno de la Policía Local desde hace dos décadas y agravada desde el pasado mes de octubre. La comisión podría ser aprobada hoy mismo, será pública, estará presidida por él mismo y tendrá representantes de todos las formaciones del Ayuntamiento.

Riestra achacó los problemas que asolan a ese colectivo al PSOE, en el gobierno municipal durante 28 años: "la Policía Local está como está porque venía así de serie", señaló en tono irónico. El regidor calificó al conflicto de "insostenible" y digno de "una chirigota de Cádiz".

"Queremos poner los puntos sobre las íes y dilucidar lo que ha pasado en los últimos veinte años y lo que está pasando ahora en el seno de la Policía Local. Queremos saber, por fin, lo que ocurre", señaló el regidor.

Riestra manifestó que "día sí y día también" recibe en su despacho escritos "del inspector y de agentes con acusaciones cruzadas y versiones contradictorias de unos contra otros". Se trata de un problema que viene "de muy atrás y en el que ha habido enfrentamientos, jubilaciones sobre la base de acoso laboral, bajas psicológicas y una guerra abierta que da pánico y deja a los ciudadanos en una situación de indefensión", indicó el Alcalde.

El funcionamiento de la Policía dista mucho de lo que quiere la gente", señaló Riestra, quien criticó la labor de UGT en toda esta polémica. "No sé donde estaban cuando se despedía a los interinos de la Policía Local a base de expedientes o cuando había bajas laborales prolongadas. Me imagino que asustados y poniéndose las manos en la cabeza al ver semejante atropello. O igual no", dijo con ironía.

En opinión del regidor, la solución al conflicto abierto en el seno de la Policía Local debe pasar por un "cambio de actitud" de sus integrantes, y por "asumir el deber del cargo desde el escalafón más básico al de mayor responsabilidad, y entender que los asuntos personales, incluida la política y los odios, no tienen cabida en el ejercicio de la vida pública de un trabajador, funcionario, interino o personal laboral dentro de un estamento como es la Policía". Son actitudes insanas que no tienen cabida. Todos ellos se deben a la ciudadanía que es quien les paga, por cierto, bastante bien", apuntó.