Por segunda vez en una semana, cientos de vecinos de Posada de Llanes se quedaron anoche sin luz. Y de nuevo durante una hora y media. Una avería ocurrida a eso de las nueve y media de la noche dejaba a oscuras a los edificios situados en el entorno de la avenida principal de la localidad. Entre los usuarios más perjudicados, los dueños de los bares, restaurantes, sidrerías y pubs de la zona, que en ese momento sumaban cientos de clientes. El malestar entre los usuarios es grande. Ya sufrieron hace un año un apagón de cuatro horas. De nuevo el pasado 26 de enero se fue la luz en la misma zona, en esta ocasión durante una hora y media. Anoche se repetía la misma situación.
Las explicaciones de la compañía, con la que no pudo hablar anoche este periódico, no satisfacen a los usuarios. La semana pasada la empresa eléctrica explicó que la zona afectada por los apagones depende de un diferencial antiguo, al contrario que otras áreas de Posada. "Sí, pero el caso es que pagamos lo mismo que los que tienen diferencial nuevo", clamaba anoche una usuaria. La luz volvió a las once de la noche.
