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JONATHAN HEVIA | Fotógrafo riosellano, ganador de un "Goya" de fotografía

"La fotografía es más que hacer clic y poner un filtro; tiene que haber sentimiento"

"Asturias tiene que sacar pecho, es la comunidad que más 'Goya' atesora"

Jonathan Hevia con su premio "Goya" en Zaragoza. DANIEL GONZÁLEZ

Jonathan Hevia Valles (Ribadesella, 1980) es uno de los dos fotógrafos asturianos que el sábado regresaron de Zaragoza con un premio "Goya", concedido por la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Aragón. La fotografía ganadora es un paisaje nevado de Fuente Dé (Cantabria), premiada en la categoría de libre creación. Hevia ya se hizo con un premio "Goya" en 2013, entonces en la categoría de boda. Apenado porque la ganadora no fuera el retrato que hizo de Arsenio Prieto, bisabuelo de su hija Carlota, ya está dándole "vueltas a la cabeza", pensando en cómo fotografiará al singular modelo, de 95 años.

-¿Pueden estar los asturianos orgullosos de la fotografía que se hace aquí?

-Asturias tiene que sacar pecho, es la comunidad que más premios atesora en la historia de los "Goya" y donde más nivel hay. Se conceden cuatro cada dos años y este han venido dos para aquí; los otros dos, uno fue para el País Vasco y otro para Almería. Cuando llegamos el viernes lo primero que hicimos fue poner la bandera de Asturias en el balcón y decir que empezaba la Reconquista otra vez (risas).

-¿Qué puertas abren estos galardones?

-A nivel laboral, por ejemplo, mucha gente se había informado para hacer las fotos de boda y el domingo ya estaban llamando para confirmar. Y a Dani (González, el otro premiado) exactamente igual. El anterior "Goya", el de 2013, lo gané con una fotografía de boda, sacada de un reportaje. El nivel con el que concursamos es el que estamos dando a los clientes. Los premios se conocen y la gente lo agradece.

-Lleva unos años de un reconocimiento tras otro, ¿se reconoce un estilo propio?

-Es complicado saber si uno tiene un estilo propio. Sí es verdad que me identifico mucho con la fotografía con la que gané, aunque a alguien le pueda sorprender que sea tan sencilla. Al final vienes a mi estudio y ves que todo es blanco, al igual que los suelos, las paredes y los techos de mi casa. Me gustan las fotografías sencillas y limpias. Cuando estoy haciendo trabajos de boda trato de buscar paredes lisas para aislar a los novios de otros elementos.

-Ha conseguido uno de los premios más prestigiosos del panorama nacional, ¿qué retos y proyectos tiene por delante?

-Tengo ganas de presentarme a la Copa del Mundo de Fotografía. El primer año era la Federación Española la que seleccionaba las fotografías para mandarlas, pero ahora ya las pueden seleccionar los propios fotógrafos. Ha habido ya dos convocatorias que se me pasaron y estoy con el gusanillo. Pero aparte de los concursos estoy metido en veinte proyectos que no tienen nada que ver, que también me llaman mucho y me traen muy de cabeza. Disfruto mucho los concursos pero no son mi prioridad, también disfruto de otros proyectos.

-Desde su forma de trabajar hasta su perfil en las redes sociales, siempre muy activo y creativo, desprenden energía emprendedora, ¿hay una filosofía detrás de todo esto?

-Eso siempre lo ven mejor los demás que uno mismo. Cada vez estoy más asustado de lo que dice la gente, que transmito mucha energía. Sí es verdad que lo que trato siempre es buscar cosas sencillas e igual inconscientemente de transmitir sentimientos y emociones de la manera más sencilla. Y vuelvo a la fotografía de la nieve, porque quizás al principio echas en falta elementos, pero quizás te está contando más que otra más elaborada y compleja. Por otra parte, estoy constantemente fijándome en el mundo digital y en lo que está por venir, que va a ser muy grande, estamos experimentando unos cambios terribles, pero con un ojo y con un pie en el pasado, en los principios de la fotografía. De ahí que quiera recuperar técnicas, experiencias, emociones y hasta olores.

-¿Cómo se imagina el futuro de un fotógrafo profesional dentro de veinte años?

-Es una pregunta complicada. Creo que tienes que tener muy claros tus ideas y principios y ser fiel a ellos. Ahora estoy apostando mucho tanto por la fotografía actual como por la que va a venir y tengo muy latente la fotografía tradicional y analógica, que todavía van a dar mucho que hablar. O por lo menos eso espero. Creo que hoy en día hacer fotos es muy fácil a priori, pero la fotografía es más que hacer un clic y poner un filtro de Instagram. Tiene que haber más sentimiento.

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