El delegado del Gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo, destacó ayer en Llanes la importancia de la colaboración ciudadana con las fuerzas de orden público para poner fin de manera definitiva a la oleada de robos que ha tenido lugar en Posada desde el pasado mes de diciembre. Aseguró que el aumento de la vigilancia por parte de la Guardia Civil en la zona está disuadiendo a los delincuentes, tras la detención de uno de ellos el pasado 19 de enero. De Lorenzo mantuvo ayer una reunión en Llanes con su homólogo en Cantabria, Samuel Ruiz, y varios mandos del Instituto Armado de ambas comunidades.

"Queremos transmitir tranquilidad a la población y pedimos la colaboración de la gente. Cada persona puede convertirse en una ayudante cuando observe a personas o coches sospechosos. Los delincuentes, antes de actuar, normalmente visitan los lugares", señaló. Abogó también por la intensificación de los controles y la buena comunicación entre la Comandancia de Gijón y la Guardia Civil de Cantabria. "Pedimos a los ciudadanos que refuercen las medidas de seguridad en sus casas y en sus negocios. A veces los negocios tienen cerraduras que pueden ser fáciles de abrir para los delincuentes y hay que ponerse al día. Las máquinas tragaperras y las cajas que se dejan llenas en los bares son una tentación para ser robadas. Sería bueno que los dueños no las dejasen sin vaciar", manifestó.

Durante el año 2016 en la zona oriental de Asturias el índice de infracciones penales ha descendido un 8,85 por ciento en relación a 2015. En lo relativo a delitos contra el patrimonio han bajado en un 14,86 por ciento respecto a 2015.

De Lorenzo aseguró que la mejora de las comunicaciones en la zona oriental, gracias a la finalización de las obras en la A-8, "ha traído ventajas de todo tipo, pero ha motivado también que el desplazamiento de los delincuentes sea mucho más fácil ahora, pues pueden comenten el robo y en poco tiempo están a varios kilómetros de distancia", destacó.