Vecinos y turistas se quedaron perplejos al contemplar en la tarde de éste miércoles como una vaca se paseaba tranquilamente por las céntricas calles de la ciudad de Cangas de Onís, sin ser guiada por persona alguna, hasta acabar siendo retenida por agentes de la Policía Local en la travesía del Güeña, a la altura de la sidrería "Vega Redonda", donde fue controlada a la espera de dar con el dueño de la misma.

La curiosa estampa fue retratada por muchos de los que paseaban esta tarde por la urbe canguesa.