Nuevo acto vandálico contra los Cubos de la Memoria de Llanes. La obra que el artista vasco Agustín Ibarrola pintó en los bloques de la escollera del puerto de Llanes pasa por su peor momento desde su creación, a comienzos de siglo. Uno de los bloques, situado en la primera fase de la obra, muy cerca del paseo del puerto, ha sido pintarrajeado en su totalidad por una de sus caras. Los hechos tuvieron lugar, según testigos presenciales, en la tarde del pasado martes.

Hace tiempo que los visitantes vienen alertando del abandono que sufre una obra que, pese a su mal estado de conservación, sigue siendo un importante reclamo turístico a la hora de atraer a visitantes hasta la capital del concejo de Posada Herrera.

Según varios testigos, eran alrededor de las cinco de la tarde del martes cuando dos mujeres jóvenes saltaron las vallas y se subieron a uno de los bloques para, spray en mano, "redecorarlo" a su manera. Uno de los pocos viandantes que en ese momento estaban por la zona, extrañado por lo que estaba viendo, se acercó a ellas para preguntar si tenían permiso para pintar el bloque. Tras reconocer que no, dejaron la "obra" a medias y se marcharon por donde habían venido tras recoger las bolsas con los materiales para pintar que portaban.

No es la primera vez que la obra de Ibarrola en Llanes sufre un ataque de estas características. En marzo de 2016 aparecieron pintadas en dos bloques sendas banderas de Uruguay. Una de esas banderas permanece desde hace 15 meses a escasos metros del cubo repintado el pasado martes. Desde su creación, hace 16 años, los Cubos de la Memoria ha sido una obra respetada escrupulosamente por los visitantes. Esto parece haber cambiado desde hace un año.

Desde varios sectores relacionados con el turismo se lanzó hace una año la voz de alarma por el decadente estado de una obra que, al estar a la intemperie y sometida de manera constante a los embates de la mar, necesita cuidados para mantener su esplendor. Buscar patrocinadores para que restauren la obra de acuerdo con el autor fueron algunas de las ideas que varios sectores lanzaron para que la obra recupere el brillo de antaño.

El Ayuntamiento de Llanes anunció el año pasado que, entre sus previsiones, no estaba de momento invertir dinero en la restauración de los Cubos, si bien se habló de que antes de 2019, se iba a intentar acometer algún trabajo de mantenimiento sobre los mismos.

Agustín Ibarrola comenzó a pintar los bloques de la escollera del puerto llanisco en el verano de 2001. La última fase se dio por finalizada en 2006. La composición refleja el paisaje, la cultura y el modo de vida de los llaniscos a lo largo de su historia.