El temporal que azotó la región hace un par de semanas causó estragos en la carretera que une Ozanes con Llerandi, en el concejo de Parres. Los vecinos temen que el hundimiento del firme a la altura del kilómetro dos de la vía PR-4 haga inviable el tránsito de vehículos y les deje incomunicados, por lo que urgen su reparación. De momento, una señal advierte en Ozanes de la prohibición de que autobuses y camiones circulen por la carretera autonómica, que da acceso a las localidades de Granda, Carriu, Tospe y Llerandi, informa C. C.