El alcalde de Llanes, Enrique Riestra Rozas (VxLl), y el segundo teniente de alcalde y edil de Obras y Contratación, Juan Carlos Armas (PP), achacaron ayer a las trabas puestas por el interventor municipal el hecho de que aún no tengan encima de la mesa la liquidación presupuestaria del año 2017 con la que poder comenzar la tramitación de los presupuestos de este ejercicio. "Los ciudadanos deben conocer la realidad más allá de que nos pueda gustar o no", dijo Riestra. Este aseguró, en relación al funcionamiento interno del Ayuntamiento de Llanes, que "podemos someternos o luchar, y hemos decidido que lucharemos".

El regidor llanisco recordó que el cierre provisional de las cuentas arroja un saldo positivo de 1.150.000 euros, que desean invertir en diferentes mejoras para el municipio. "Estamos a la espera del cierre definitivo. Estoy seguro de que no hay ningún ciudadano que no quiera estas inversiones", dijo. Riestra reveló ayer que Intervención dio el pasado mes de mayo un plazo "muy variable" para llevar a cabo el cierre de las cuentas, que oscila entre "un mes, que podría reducirse a diez días, y dos meses, según comunicó el interventor municipal a través de un informe. Tener este cierre es importante para acometer las obras en base a las inversiones financieramente sostenibles. Nosotros no podemos hacer el cierre pues no somos técnicos", indicó.

En relación al proyecto de presupuestos para 2018, Riestra señaló que el 9 de mayo Intervención mandó un anteproyecto de 17 páginas que nada tiene que ver con el que se realiza en otros lugares y que, según deja entrever el regidor, pone de manifiesto las zancadillas que la administración local pone al equipo de gobierno para poder elaborar las cuentas. Éste manifestó que están llevando a cabo una lucha "agotadora" y habló de un trasfondo que "excede de la normalidad administrativa".

Riestra sostiene que las trabas administrativas que se le ponen al cuatripartito no existían con anteriores equipos de gobierno.

En relación a la bolsa de empleo para cubrir una posible baja del interventor titular, el Alcalde reveló que el secretario municipal modificó las bases de la misma, lo cual ha ralentizado el procedimiento. Habló de una lucha titánica para acabar con "un sistema establecido en el Ayuntamiento. O me tumban o seguiré dando guerra", advirtió.

En otro orden de cosas, la sección sindical de UGT en el Consistorio denunció ayer el desprecio al que, según ellos, se ven sometidos por parte del Alcalde y el edil de Personal, Javier Ardines. Sostienen que las bases para elaborar una bolsa de trabajo para auxiliar de Policía Local han sido publicadas en el "Boletín Oficial del Principado de Asturias" (BOPA) sin la "preceptiva negociación sindical". Califican a las bases de "peculiares" y "pioneras", y piden que se elaboren en base a los requisitos que marca la ley.