Para cumplir las ilusiones que se tienen en la vida se necesita marcarse un objetivo y tener iniciativa. Y eso es lo que han hecho Emilio Pérez-Abad y José Daniel Martino, que el pasado domingo llegaron a Roma procedentes de la localidad riosellana de Tereñes a bordo de sus vespas, después de una semana de viaje en la que recorrieron numerosas ciudades emblemáticas como Génova y Luca antes de llegar a la capital italiana, donde se encuentran descansando unos días antes de emprender de nuevo su viaje.

"Esto era algo que queríamos hacer hace mucho tiempo, nos pusimos una fecha y aquí estamos", cuenta Pérez-Abad, quien se muestra orgulloso de que las dos motos, de 22 y 32 años, hayan aguantado "como jabatas".

Así, han visitado numerosos lugares y conocido a varias personas, llamando la atención allí por donde pasaban por lo curioso de su viaje, incluso sorprendiendo a dos parejas de Tineo que, además de fijarse en ellos por las vespas, también quisieron pararles por encontrarse a dos asturianos embarcados en semejante aventura. Eso sí, no lo están haciendo solos, ya que ambos cuentan con la "insuperable ayuda" de Marisa Fernández, quien está siguiendoles en este viaje con una autocaravana a modo de apoyo por si surgiera algún problema.

Ahora, su intención es quedarse en Roma hasta el jueves "para descansar un poco de las motos" y así coger fuerzas, ya que el viaje de vuelta va a ser tan ajetreado como el de ida. Por el momento, ya tienen pensado dirigirse hacia el sur para visitar Pompeya, Sorrento, Capri y Positano.

En cuanto al regreso a Ribadesella, quieren hacerlo en una semana y, "si se puede, la intención es hacer todo el camino en la Vespa", manifiestan.

Esta aventura, lejos de calmar sus ganas de viajar a bordo de sus motos, no ha hecho más que motivarles y ya se encuentran planteándose cuál podría ser su próximo objetivo. "Repetiríamos sin duda, de hecho tenemos otra ilusión, que es ir también en vespa hasta París, pero, de momento, queremos disfrutar de esto", concluye Pérez-Abad.