Preocupación en la rula de Ribadesella ante las pocas angulas que por el momento se pescan en la playa de Santa Marina y la ría en este inicio de la costera. Una situación que, si bien estaba siendo la tónica general durante esta primera semana de la campaña, se esperaba que pudiera remitir durante la madrugada de ayer, tras una noche de "oscurada" con la luna nueva y la marea era alta, dos de las circunstancias más favorables para la pesca de la cría de la anguila. Pero, sin embargo, no ha arrojado los resultados esperados.
Y es que, ayer se rularon en Ribadesella tan solo dos kilos y medio del conocido como "oro blanco" del Cantábrico. "Este año no hay nada", lamenta José Manuel Pintado, "Garu", miembro de la Cofradía de Pescadores riosellana y uno de los encargados de preparar las angulas que llegan a la rula para su venta. De hecho, tan pocas angulas están saliendo incluso con "oscurada" que ayer había quienes en la rula riosellana calificaban ya la campaña de "terrorífica".
Eso sí, los anguleros no pierden las esperanzas y esperan que esta primera semana de costera no se convierta en la norma general y al finalizar la campaña de la angula, a finales de febrero, los resultados sean muy distintos a los que se están registrando por el momento.
Lo que sí que no es del todo desfavorable es el precio que se está pagando por tan preciada captura. Ayer, la angula se vendió en Ribadesella a 465 euros el kilo, lo que reportó un total de 1,162,50 euros. Así las cosas, puede ocurra como en la pasada campaña y los resultados finalmente no sean tan malos para la Cofradía y los anguleros.
Y es que, en la costera de 2017-2018 se capturaron 1.142 kilos de angula en total, muy lejos de 1.768 kilos del año 2014, la mejor cifra registrada hasta ahora. Sin embargo, a nivel de facturación supuso la tercera mejor campaña de la historia para Ribadesella, ya que se ingresaron 523.288 euros, tan solo por detrás de lo recaudado en el año anterior y en el 2005.
