El Boletín Oficial del Estado (BOE) se hizo ayer eco de la aprobación definitiva de la declaración de la Reserva de la Biosfera de Ponga por parte de la Unesco. La declaración fue aprobada durante la 30.º sesión del consejo internacional de Coordinación del Programa "El Hombre y la Biosfera" (MaB por sus siglas en inglés) de la Unesco celebrada en Palembang (Indonesia) en julio de 2018.

El ámbito propuesto como Reserva de la Biosfera afecta a 20.506 hectáreas del concejo de Ponga, que, según el censo de 2017, cuentan con 623 habitantes. Según el documento aprobado, Ponga posee un medio natural caracterizado por su gran diversidad y elevado grado de conservación. Los ecosistemas más abundantes son los bosques, que ocupan 8.295 hectáreas, aproximadamente el 40% de la superficie. En su mayoría se corresponden con hayedos y, en menor medida, con robledales albares, rebollares, bosques mixtos y castañedos. Esta variedad de hábitats da cobijo a especies de flora protegida en el ámbito autonómico, entre las cuales se encuentran el tejo y el acebo. Con respecto a la fauna, la zona constituye un refugio para especies protegidas, entre las que destacan el urogallo cantábrico, el pico mediano, el águila real y el oso pardo cantábrico.

Con la aprobación definitiva de la candidatura de Ponga como nueva reserva de la Biosfera (la séptima con la que cuenta ya el Principado, junto a los Oscos-Eo, el Parque Nacional de los Picos de Europa, y los parques naturales de Las Ubiñas-La Mesa, Redes, Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias, y Somiedo), España cuenta ya con 49 sitios de esta naturaleza y amplía su liderazgo internacional en cuanto a esta figura ambiental.

Los vecinos de Ponga, que en un primer momento mostraron recelo ante el temor de que la distinción trajera aparejadas restricciones a sus actividades económicas, ven ahora la Reserva de la Biosfera como una oportunidad de desarrollo y promoción para el concejo bajo una marca internacional de calidad.